No hay que ser fanático de Guaidó para apoyarlo
Algunos opositores están más pendientes de destronar a Guaidó y se olvidan de que el verdadero adversario es Maduro por la sencilla razón de que Guaidó es el dirigente de la oposición mejor posicionado en las encuestas serias. Además, subrepticiamente, algunos de estos opositores apoyan para este 21N a candidatos que rompen el frente unido, cuando el que se presenta no es de su partido o de la fracción de este que controlan.
Lo que no han podido lograr estos opositores, a pesar de que han viajado a las principales capitales del mundo, es ser tomados en serio y, mucho menos, obtener algún rechazo a Guaidó por parte de de esos gobiernos.
Lo grave es que han intentado crear figuras jurídicas heteroclitas para seguir controlando los activos de la República en el exterior, a pesar de que les han explicado que no son aplicables, es decir que si no se continúa con el gobierno interino hasta que se puedan realizar elecciones libres, la alternativa es entregárselos a Maduro.
Algunos de los principales constitucionalistas del país sostienen que jurídicamente es sostenible prorrogar el régimen de transición hasta que se puedan celebrar las elecciones presidenciales.
Lo que suceda el 21 de noviembre va a repercutir negativamente en contra de los que no entendieron que la única lucha posible hoy en Venezuela es contra Maduro y el PSUV, que son los culpables de la destrucción de Venezuela.