Argumentos vacíos, signo de desesperanza
Cuando un país ha sido sometido a una hegemonía comunicacional (como es nuestro caso), a través de la cual, se repite una y mil veces la misma mentira, privando progresivamente a sus ciudadanos de la certeza de un acceso confiable a los servicios públicos y además se les suprime el derecho a escoger qué y cuándo comer, cuándo poder ir de vacaciones a cualquier lugar, además de sembrarles miedo a enfermarse porque no hay los medios con los cuales cubrir una hospitalización, es lógico que esos ciudadanos busquen expresarse en el único espacio que permanece libre: las redes sociales.
Pero pasa que muchos, cuando se explayan en esas redes, en vez de utilizarlas para construir un espacio de libertad, lo que hacen es vaciar el alma y descargar las frustraciones que los acongojan, arrastrando con ellos pesimismo, desconfianza y descalificaciones de todo género en contra de quienes no se amoldan a su estado de ánimo.
Mientras eso siga ocurriendo y no se cambie la actitud, el gran ganador de esa siembra de desesperanza es el régimen, que ha aprendido de Cuba cómo someter psicológicamente a la población para mantenerse en el poder.
Las redes sociales pueden ser un instrumento muy poderoso para derrumbar a un régimen opresivo, así fue en Ucrania, Tunéz y Egipto y pareciera ser lo que empieza a ocurrir en Cuba, cuando el lema Patria y Vida se vuelve viral.
Es hora de dejar de lado la denigración en las redes y concentrar todas las fuerzas que queden en intentar una sola cosa: qué hacer para contribuir a agrietar el muro de la dictadura hasta lograr que caiga.
Totalmente de acuerdo con lo expresado en el Editorial. Tenemos que actuar como el pueblo de Fuente Ovejuna!!!!