Conferencia Episcopal exige investigar la muerte de migrantes venezolanos en Güiria
El grupo también rechazó los pronunciamientos de ambas naciones que, según consideran, están lejos de aceptar las responsabilidades
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) lamentó este lunes 14 de diciembre, a través de un comunicado, la muerte del grupo de migrantes venezolanos del naufragio en las costas de Güiria, en el estado Sucre, cuyos cuerpos fueron encontrados la noche del sábado 12 de diciembre.
“Debemos lamentar la pérdida de vidas humanas, específicamente las personas encontradas muertas en la costa del estado Sucre y otras personas desaparecidas, quienes habrían intentado alcanzar la costa de Trinidad en embarcaciones tipo peñero y no pudieron hacerlo por haber sido devueltas por las autoridades de Trinidad y Tobago”, señalan.
La Iglesia venezolana también rechazó la conducta de las autoridades trinitenses “por violar el principio de no devolución” al regresar a los migrantes quienes habrían salido en busca de un mejor futuro en la isla.
Además, el cuerpo episcopado agregó que las autoridades de ambos países están obligadas a respetar los derechos humanos de las personas, sobre todo de los migrantes.
Y señaló de inaceptable “las manifestaciones de estigmatización y discriminación hacia las personas de nacionalidad venezolana que en calidad de migrantes voluntarios o forzados buscan regularizar su situación legal en dicho estado”.
La Conferencia Episcopal subrayó, además, que la investigación de los hechos “no debe ser de carácter meramente formal, sino que debe conducir al establecimiento completo de los hechos, y a actos conclusivos que conduzcan al establecimiento de las responsabilidades penales, civiles y administrativas a las que haya lugar”.
Y, en este sentido, rechazaron los pronunciamientos de ambas naciones que, según consideran, están lejos de aceptar las responsabilidades.
Tragedia en Güiria
Este sábado 12 de diciembre, funcionarios de la Guardia Costera hallaron el cuerpo de 19 migrantes venezolanos, entre ellos varios menores de edad, quienes se presume intentaban huir de Venezuela en un bote con destino a Trinidad y Tobago.
Al menos 11 cuerpos fueron hallados flotando en el mar a 6.3 millas de la costa, lugar desde donde salió el peñero con destino a la isla.
Y, al momento en que se escribe esta nota, se conoce extraoficialmente, que la cifra de muertes se ubica en 22 ante los últimos hallazgos de este domingo.
El comisionado para la Organización de Estados Americanos, David Smolansky, detalló que los migrantes fueron “devueltos por las autoridades trinitenses” y, posteriormente, naufragaron.
El pasado 22 de noviembre, 16 niños venezolanos, entre los que se encontraba un bebé de cuatro meses, fueron deportados por el Gobierno de Trinidad y Tobago. Luego de permanecer alrededor de 48 horas desaparecidos, volvieron a la isla.
En esta oportunidad, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instó a las autoridades trinitenses a vigilar la protección de los niños migrantes.