Consecomercio presenta su propio plan de reactivación económica para iniciar el 27 de julio
La propuesta concreta es reabrir restaurantes, hoteles, centros comerciales y otro tipo de comercios bajo protocolos de bioseguridad
Consecomercio ha propuesto desescalar, paulatinamente, el confinamiento preventivo y las restricciones de movilidad a partir de este lunes 27 de julio para el sector comercial de toda Venezuela centrándose en las medidas de bioseguridad recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La propuesta concreta es reabrir restaurantes, hoteles, centros comerciales y otro tipo de comercios bajo el estricto aseo de superficies y de objetos que tienen contacto con el público y los empleados, el lavado de las manos, el control de los aforos y el distanciamiento social.
En una rueda de prensa ofrecida por el presidente de Consecomercio, Felipe Capozzolo, se denunció que el sistema de flexibilización 7×7 que se había impuesto en el país no ha ofrecido continuidad en las actividades económicas de los sectores comercial, empresarial, industrial y agrario, por lo que es necesario ampliar el margen de acción de manera urgente.
Desde Consecomercio se advierte que 30% de los comercios en el país tienen problemas para pagar sus gastos y sus nóminas, por lo que es necesario ofrecer la opción de que los mismos venezolanos “luchen y determinen sus propio destino”.
Capozzolo advirtió que al igual que la salud, también es prioritario preservar los medios de vida de las personas que están desincorporadas de sus puestos de trabajo para mitigar la pérdida de empleos y la caída del consumo en el país, pues se estimó que que el consumo podría caer cerca del 76 % a finales de 2020 si no se aplican cambios estratégicos respecto al impacto económico del covid-19 en Venezuela.
Y a juicio del representante, es urgente plantear escenarios de país postcovid-19, pues las proyecciones sobre la pandemia indican que la enfermedad nos acompañará durante varios meses. “No podemos aceptar el confinamiento sin que exista una medida paralela que se nos ayude a subsistir (…) Hay que cambiar la variable de control, pues estamos en el periodo de fase exponencial de contagios y hemos hecho de todo: cuarentena radical, flexibilización 7×7, 7×7 interruptus y siguen aumentando los casos”, insistió.
Y es solo algunos sectores productivos –como el farmacéutico y el relacionado con los alimentos- obtuvieron permisos especiales y salvoconductos de movilidad debido a que fueron calificados como “prioritarios”, mientras que el resto ha tenido que pausar sus actividades durante más de 120 días de confinamiento, y contando.
“Más que personas, el covid-19 está matando empresas en Venezuela”, sentenció el vocero.
“Si en el local no respeta las medida de bioseguridad, no entre”
Esta es la recomendación dada por Capozzolo, quien considera que en Venezuela se clama por la opción de elegir y de que exista competitividad en los mercados.
Además, según Capozzolo, la evaluación de la flexibilización 7×7 indica que las restricciones por número de cédula y los horarios especiales generan picos de botella –como las colas registradas en las afueras de las entidades bancarias- que no pueden ser mitigados por los comercios.
Por lo tanto, se resaltó que es responsabilidad de todos y cada uno de los ciudadanos cuidar de su propia integridad.
Más escasez, más inflación, menos poder adquisitivo de las divisas
Según advirtió Capozzolo, el cierre de empresas y comercios -lo que se traduce en menos oferta de bienes y servicios- podría generar que el acceso a la divisas pierda el efecto protector del patrimonio que venía desempeñando en los último años en Venezuela.
Sobre esto, se debe tener en cuenta que la actividad económica en el país ya se redujo en 25% durante el primer trimestre de 2020 y la inflación acumulada cerró en 508,47% al final de primer semestre, según datos del parlamento.