Libertad o extradición: el futuro de Alex Saab en manos de Cabo Verde
El destino de Alex Saab, que permanece detenido en Cabo Verde, está en manos de la Justicia del archipiélago africano, que deberá decidir próximamente acerca de la solicitud formal presentada por Estados Unidos para extraditarlo hacia ese país, así como también sobre el segundo recurso de «habeas corpus» presentado por los abogados del colombiano.
El Gobierno de Cabo Verde informó este martes que recibió la solicitud de extradición, que incluye documentos y declaraciones juradas relacionadas con una acusación federal contra el presunto testaferro de Nicolás Maduro el año pasado en Miami.
La Procuraduría General de ese país tiene ahora un plazo de 65 días, que cuenta a partir de este 12 de junio, para responder a la petición estadounidense.
La Justicia estadounidense presentó cargos contra Saab y su mano derecha, Álvaro Enrique Pulido, a quienes acusa de blanquear hasta 350 millones de dólares supuestamente defraudados a través del sistema de control cambiario en Venezuela, en el marco del programa de Nicolás Maduro de alimentos conocido como CLAP.
Según EE. UU., entre noviembre de 2011 y septiembre de 2015, Saab y Pulido se confabularon con otros para lavar sus ganancias ilícitas y transferirlas desde Venezuela a cuentas bancarias estadounidenses, motivo por el que Washington tiene jurisdicción en el caso.
Saab fue detenido el pasado 12 de junio, cuando el avión privado en el que viajaba desde Rusia hasta Irán, hizo una escala en Cabo Verde para abastecerse de combustible, ocasión que fue aprovechada por la Policía local para capturarlo, cumpliendo la circular roja de Interpol que ordenaba su captura.
Alegatos de la defensa
Entretanto, José Manuel Pinto Monteiro, el abogado defensor en Cabo Verde de Saab, introdujo en menos de cinco días una segunda solicitud de «habeas corpus» en la Corte Suprema de Justicia de la nación africana, con el objetivo de tratar de liberar al colombiano.
La semana pasada, la defensa de Saab había presentado un primer recurso -desestimado posteriormente por la Justicia caboverdiana- alegando que «el detenido estaba cubierto por inmunidad de jurisdicción penal y tenía derecho a la inviolabilidad personal como enviado especial de Venezuela» cuando fue detenido en Cabo Verde.
En esta oportunidad, los abogados de Saab consideran que Interpol ya había cancelado la «alerta roja» al momento de ser capturado. Se espera en las próximas horas una decisión de Cabo Verde sobre este segundo recurso.
La «alerta roja» es una solicitud a las fuerzas del orden de todo el mundo para localizar y detener provisionalmente a una persona en espera de extradición, entrega o acción judicial similar.
El «habeas corpus» es el derecho de un detenido a comparecer ante un juez o tribunal para que resuelva si su arresto fue o no legal, y si debe levantarse o mantenerse.
Proceso en curso
La Fiscalía General de Cabo Verde informó el pasado viernes que el proceso de extradición de Alex Saab comprende una fase administrativa y judicial, que comienza después de la decisión favorable de la solicitud de extradición por parte del Ministro de Justicia.
En un comunicado de prensa, el Ministerio Público explicó que la fase administrativa debe contar con la intervención del miembro gubernamental responsable del área de Justicia, mientras que la fase judicial comienza después de la decisión favorable de la solicitud de extradición por dicho gobernante.
Politización y presiones
Por otro lado, una fuente consultada por la agencia EFE, se manifestó «un poco preocupada por la politización del caso por los abogados de Álex Saab en la prensa caboverdiana», por temor a que pueda «condicionar la opinión de los tribunales de Cabo Verde, que no aprecian ninguna interferencia política en su acción».
El Ejecutivo caboverdiano -subrayó- ha mantenido una posición de «distanciamiento total en relación con este caso», permitiendo que el Poder Judicial haga su trabajo con independencia.
Aunque se mostró confiada en que la decisión final debería ser favorable a la extradición, la fuente dejó abierta la posibilidad de una sentencia judicial en contra y, en ese caso, Estados Unidos «sabrá comprender» ese fallo porque conoce que en Cabo Verde «los tribunales actúan de manera independiente, sin interferencia del poder político u otros intereses».
Sobre los aspectos diplomáticos del caso, matizó: «Estados Unidos no ha intentado influir en la decisión a su favor«, mientras que «la presión de Venezuela ha sido intensa«.