Denuncian «detención arbitraria e ilegal» de Alex Saab por parte de Interpol
La administración de Nicolás Maduro calificó este fin de semana de «arbitraria» la detención del empresario colombiano Álex Saab, acusado de ser testaferro de Maduro y que fue arrestado el viernes por la noche en un aeropuerto de Cabo Verde.
A través de un comunicado de la Cancillería, dijeron que tuvo «conocimiento de la detención arbitraria del ciudadano venezolano Álex Saab por parte de la Interpol» y destacó que su arresto es un hecho «violatorio del derecho y de las normas internacionales» que «se corresponde con una de las acciones de agresión y asedio contra el pueblo venezolano».
Saab, agente de Venezuela
Asimismo, aseguran que Saab se encontraba «de tránsito en la República de Cabo Verde, durante una escala técnica» en su condición de «agente del Gobierno Bolivariano de Venezuela».
Saab tenía como objetivo «realizar gestiones para garantizar la obtención de alimentos» para el programa gubernamental de comida susbsidiada de los Comités Locales de Alimentación y Producción (CLAP), así como de medicamentos, insumos médicos «y otros bienes de carácter humanitario para la atención de la pandemia del covid-19».
También explican que en su detención se violaron todas las normativas y procedimientos puesto que «no existía código rojo vigente», una orden internacional utilizada por la Interpol para solicitar la detención preventiva con miras a la extradición.
Según el comunicado de la administración de Maduro, la Interpol emitió «una extemporánea orden de captura para justificar la detención».
Apelan además a que no se consideró «la inmunidad diplomática que el derecho internacional le concede a un agente de un Gobierno soberano».
Saab, de nacionalidad colombiana y ascendencia libanesa, tenía una alerta de Interpol debido a «la acusación en Estados Unidos por delitos de lavado de dinero» contra Saab, precisó a EFE una portavoz del Departamento de Justicia estadounidense.
«Venezuela defenderá sus derechos»
El gabinete venezolano dijo que ha emprendido «todas las gestiones correspondientes por la vía diplomática y legal para garantizar los derechos humanos» de Saab, así como «su inalienable derecho a la defensa».
Asimismo, apeló a «la amistad y las relaciones de respeto» históricas entre el Estado caboverdiano y Venezuela y pidió que se deje en libertad a Saab, así como «que se facilite su regreso protegiendo sus derechos fundamentales, a partir del debido proceso».
El anuncio de su detención se produjo cuatro días después de que la Fiscalía de Colombia impusiera medidas cautelares con fines de extinción de dominio (expropiación) a ocho inmuebles de Saab que, presuntamente, hacían «parte del patrimonio ilícito» que constituyó el empresario «a través de operaciones financieras irregulares».
Según el ente investigador colombiano, esos bienes tienen un valor de 35.000 millones de pesos (unos 9,7 millones de dólares) y están ubicados en la ciudad caribeña de Barranquilla.