Fedecámaras propone plan de emergencia económica ante el covid-19
La Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras) publicó este viernes un plan de propuestas transversales y sectoriales para Venezuela ante el covid-19. La iniciativa incluye medidas de carácter tributario, así como estímulos a la actividad productiva.
El plan aborda seis puntos fundamentales:
• Garantizar el abastecimiento alimentario, medicinas e insumos médicos
• Asegurar el empleo y la seguridad sanitaria de los trabajadores
• El establecimiento de condiciones financiera de emergencia
• Prestación de servicios públicos y suministro de combustibles
• Flexibilización tributaria
• Plan comunicacional para la prevención y control de la enfermedad
• Aplazamiento de nuevas regulaciones legislativas o administrativas
• Mantener el empleo
En el tema financiero, Fedecámaras solicita un régimen de emergencia que incluya la «disminución del encaje legal del sector bancario nacional para facilitar el otorgamiento de facilidades de financiamiento», con el fin de enfrentar la creciente crisis de caja que padecen las empresas en medio de la cuarentena nacional vigente.
El empresariado demanda “garantizar el acceso al crédito, flexibilización de las condiciones de pago y establecimiento de condiciones especiales de financiamiento para los sectores vinculados a la emergencia nacional y sectores claves de la economía”.
En relación a la flexibilización tributaria, las medidas que solicita el sector para sobrevivir a esta coyuntura sanitaria de alto riesgo, que se suma a una depresión económica de seis años y una hiperinflación que pasa de los dos años, son entre otras, suspender y flexibilizar los lapsos para declaración y pago de obligaciones tributarias nacionales, estatales y municipales, así como el pago de multas y sanciones.
Proponen la suspensión del régimen de anticipos de ISLR e IVA, el aplazamiento de la entrada en vigencia de las reformas del Código Orgánico Tributario (COT) y Ley de Impuesta al Valor Agregado (IVA).
También plantean la suspensión temporal de la actualización de la Unidad Tributaria (Providencia SENIAT del 21.01.2020 publicada en la Gaceta Oficial Nº41.839 del 13.03.2020).
Además, solicitan la prórroga de hasta 3 meses de la declaración, liquidación y pago del Impuesto Sobre la Renta (ISLR), así como otorgamiento de exoneración para las personas naturales perjudicados por la emergencia y con salario inferior equivalente a $50 a tasa de cambio oficial.
El plan propuesto por el sector empresarial incluye además una propuesta para mantener el empleo durante la coyuntura, pues es factible que, si se prolonga la estrategia de aislamiento social, algunas empresas de las que quedan, no arrasadas por la crisis preexistente, no resistan el impacto del coronavirus.
En este sentido, el gremio cúpula del empresariado plantea: la adopción y difusión coordinada de medidas sanitarias e higiene para trabajadores, para evitar contagio y propagación del virus.
Así como la flexibilización de las actividades laborales bajo la fórmula de teletrabajo, en este sentido es indispensable recordar la vulnerabilidad de los servicios de telecomunicaciones en el país y la suspensión temporal de labores no esenciales o de un conjunto de trabajadores por fuerza mayor.
Igualmente plantean el pago de una compensación extraordinaria y única para los trabajadores de las actividades que resulten suspendidas o reducidas, con carácter no salarial, con un aporte parcial del Estado, especialmente para pequeñas empresas.
En realidad al gobierno no le debería costar mucho el satisfacer en gran medida las solicitudes contenidas en el documento. Al fin y al cabo el empresariado trabaja por mampuesto y le colabora en mucho al régimen. Tanto es así que los famosos bonos o donaciones vía Carnet de la Patria no suelen pasar de dos dolares y afortunadamente, el intento de estafa con la criptomoneda no cala en la población ni tampoco se pueden convertir en monedas duras ni tienen incidencia alguna sobre sueldos, salarios y pensiones, que es como si no existieran Más aún, todos guardan un silencio cómplice pues tener a mano la mano de obra esclava, es más una bendición que un perjuicio. Y si te dan créditos bancarios, no son para «salarios mínimos» sino para el sector productivo privado esencialmente. Y en cuanto a las medidas tributarias, aquí nadie puede pagar los impuestos si de verdad están tan quebrados como tanto lo pregonan y al fin de cuentas la tendencia es irse del país y vivir de las reservas en dólares y euros, el problema es que el COVID – 19 está matando gente en USA y Europa, y donde el refugio natural (España e Italia), son fábricas de muerte. Además ya nadie entra ni sale de sus fronteras. Trabajar en casa on line y cuando empeore la crisis, también on line quedarán despedidos. No obstante, la subida de las unidades tributarias es algo ya inevitable pero este no es el mejor momento, sí deberían aplazarlas. En el fondo de todo esto enfrentamos un gobierno muy inepto en materia económica pero que no ha perdido el control político – militar de la nación y tanto es así, que ya se montó en el camino de los 25 años y hasta el coronavirus le ha caído como una bendición de Dios que lo está atornillando más y más al poder. Las condiciones para una guerra civil las congeló el Covid – 19. Ya el pueblo se acostumbró a obedecer y al que no le gustó se va o se iba antes o después de la pandemia. El todo es sobrevivir y hablar todo lo que queramos pues eso no tumba gobierno y ni Guaidó ni Trump ya nada pueden hacer ni lo quieren hacer pues han devenido en muertos vivientes, que mi hijo médico en Alemania con guardias de 32 horas se encarga de los contagiados de la pandemia y luego a las bolsas plásticas; y la hija en su casa dirigiendo la gerencia de la multinacional en Dubai, pero sin poder salir al parque de su residencia. Y que nos vayamos de aquí, pero no nos vamos a ir, que nos calaremos al jefe de la «Banda de los 7», que Nico por tonto es más tolerable y que supongo morirá en Miraflores de viejo y ni me enteraré pues ya estaré convertido en cenizas. En pocas palabras : El empresariado está en su pleno derecho de defender sus intereses que en el fondo van a terminar coincidiendo con los del gobierno y nosotros, como clase trabajadora motivando al movimiento obrero y campesino para rebelarnos contra esta autocracia, sin vendernos ni traicionando lo que es una lucha universal por la paz, la justicia y el trabajo.