Incidentes entre partidarios de Guaidó y Maduro en embajada venezolana en Brasil
Un confuso incidente se produjo hoy en la embajada de Venezuela en Brasil, cuando un grupo de seguidores del presidente encargado Juan Guaidó ingresaron al recinto diplomático, luego de que algunos funcionarios retiraran su apoyo a Nicolás Maduro, acción que posteriormente fue repelida por partidarios de este.
La representante de Guaidó en el pais amazónico, María Teresa Belandria, señaló en un comunicado oficial que «Un grupo de funcionarios de la Embajada de Venezuela en Brasil se comunicó con nosotros para informarnos de que reconocen al presidente Juan Guaidó. Estos procedieron a abrir las puertas y a entregar voluntariamente la sede diplomática a la representación legítima acreditada en Brasil».
Asimismo, añadió Belandria que posteriormente «un grupo muy violento de funcionarios cubanos, junto con gente del Partido de los Trabajadores (PT), encabezados por el ex presidente de Cadivi y agregado militar de Maduro en Brasil, Manuel Barroso, irrumpió de manera violenta a la embajada, golpearon e intimidaron a un grupo de personas que estaban allí».
Además, delegados de Guaidó informaron que más de 20 funcionarios de Maduro tenían sus credenciales vencidas «desde hace varios meses».
Entretanto, el Comisionado Presidencial para las Relaciones Exteriores, Julio Borges, acusó a Barroso de asaltar la sede diplomática «con agentes cubanos» y denunció ante la comunidad internacional este «atropello del régimen».
En su cuenta de Twitter, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, repudió la interferencia de «actores externos» en los sucesos acaecidos en la embajada y anunció que se van a tomar las medidas necesarias «para resguardar el orden público y evitar actos de violencia», en conformidad con lo que establece la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
La otra cara
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores designado por Nicolás Maduro, Jorge Arreaza denunció a través de su cuenta en Twitter la «invasión» de la Embajada en Brasilia.
Entretanto, el diputado Paulo Pimenta (PT) afirmó que se trató de una «invasión» y que hubo «un enfrentamiento bastante violento» en las instalaciones. «Hay indicios de que la policía de Brasilia o la misma cancillería hayan facilitado y protegido la acción de los golpistas que intentaron tomar a la fuerza ese espacio», dijo Pimenta, señalado como una de las personas que entró de manera violenta para retomar el control de la Embajada.
