El precio del petróleo está experimentando fuertes subidas en un ambiente volátil, tras los ataques ocurridos el fin de semana a las principales refinerías de Arabia Saudí. El crudo de Texas (WTI) para entrega en octubre abrió este lunes con un alza del 10,50%, superando la barrera de los 60 dólares el barril.
A las 09.05 hora local (13.05 GMT), el crudo de referencia estadounidense cotizaba a 60,61 dólares el barril, 5,76 dólares más que el viernes, en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), donde se negociaba un volumen de más de 619.000 contratos.
El valor del petróleo de Estados Unidos, que llegó a subir en algún momento hasta un 15,5%, se ha disparado después de que los ataques con drones contra dos refinerías de Arabia Saudí redujeran en más del 5% el suministro global del crudo.
El alza se ha repetido en el crudo europeo Brent, el cual subía a media sesión de este lunes un 8,95 %, hasta 65,62 dólares, en el mercado de futuros de Londres.
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El barril de petróleo para entrega en noviembre sumaba 5,39 dólares en el International Exchange Futures (ICE) respecto al cierre del pasado viernes, cuando acabó en 60,23 dólares.
En las primeras transacciones, el Brent acumuló órdenes de compra que elevaron el precio hasta 71,95 dólares, lo que representa un alza de 19,5%, la mayor subida diaria del barril desde hace más de 28 años, en plena Guerra del Golfo en 1991.
Tenso panorama mundial
Aramco, líder petrolero en el mundo, ha indicado que llevará varias semanas restablecer sus operaciones, lo que hace temer graves consecuencias para el suministro de crudo a nivel mundial.
De acuerdo con la compañía, los ataques, que han reivindicado los rebeldes hutíes de Yemen y que Estados Unidos atribuye a Irán, han recortado aproximadamente la producción de crudo en unos 5,6 millones de barriles diarios.
Ante la inquietud sobre una escalada de los precios, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha autorizado la liberación de reservas de petróleo de su país, para, si fuese necesario, garantizar el suministro mundial.
No obstante, el secretario estadounidense de Energía, Rick Perry, aseguró al respecto este lunes que es «todavía prematuro» saber si es necesario recurrir al petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR) del país para compensar la subida de precios de crudo.
Por su parte, Rusia afirmó este lunes que no prevé ninguna medida de emergencia en el marco de la plataforma ampliada de la OPEP y otros productores de petróleo (conocida como OPEP+) tras el atentado contra las instalaciones de la petrolera estatal saudí Aramco.
La inestabilidad en la región contribuye por sí misma a que la cotización del crudo mantenga la presión alcista, dado que los inversores que operan en el mercado de futuros del petróleo tienen en cuenta la posibilidad de nuevas interrupciones del suministro.
La consultora Capital Economics ha dibujado tres posibles escenarios futuros. En el primero, que considera el más probable, Aramco lograría restablecer el bombeo la próxima semana, con lo que la cotización del Brent regresaría a un nivel en torno a 60 los dólares por barril.
Si se tardara «meses» en solventar el problema, el crudo podría subir hasta 85 dólares por barril, según esa firma, que en caso de que las tensiones derivaran en un conflicto militar abierto contempla la posibilidad de que el precio se llegara a disparar hasta 150 dólares por barril antes de final de año.
El incremento del precio beneficia a las petroleras y a industrias auxiliares del sector, pero puede golpear al mismo tiempo a las economías de países importadores de crudo, así como a empresas dependientes de la compra de derivados del petróleo.