El Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) reportó al cierre de julio del corriente año un total de 623 protestas, equivalentes a un promedio de 21 diarias, pero que -en comparación con el mismo periodo del año pasado- ello implicó una disminución de 347%.
Con base a su último informe, se tiene que de las 623 protestas, 276 fueron en rechazo a la deficiencia en la calidad de los servicios básicos, en promedio 9 protestas diarias.
Destaca además que el estado Táchira repuntó con 71 protestas, seguido por Miranda (54), Distrito Capital (51), Bolívar (44) y Lara (41).
El documento señala que debido a la crisis económica que se vive en Venezuela, el acceso y disfrute de algunos servicios, como el agua y gas, inclusive la reparación de averías, debe costearse en moneda extranjera.
La oscurana
A cinco meses del primer gran apagón nacional, los venezolanos sufrieron una nueva afectación del servicio eléctrico a gran escala, la quinta en lo que va de año. Durante todo el mes se registraron 61 protestas en rechazo a los apagones.
El restablecimiento del servicio en un lapso de tiempo menor, en comparación con las horas sin luz durante los apagones anteriores, y la normalización y gestión del déficit eléctrico por parte de los ciudadanos pudieran ser algunas explicaciones a este comportamiento.
La grave crisis eléctrica continúa en el país, sobre todo en las regiones. Algunas ciudades no se han recuperado en su totalidad, otras viven bajo un esquema de racionamiento del servicio, afectando la cotidianidad ciudadana, las actividades laborales, comerciales, educativas y salud, así como la comunicación telefónica, acceso a internet y, por lo tanto, el derecho a la información.
Vecinos protestaron en las calles en 52 ocasiones para exigir el acceso al agua potable. Las dificultades de suministro han estado vinculadas a fallas del servicio eléctrico, por falta de inversión y mantenimiento de las estaciones de bombeo, así como a problemas de potabilización.
Por su parte, las constantes fallas en la distribución y venta de gas doméstico generaron 163 protestas, sobre todo en el interior del país.
En cuanto a los reclamos laborales, estos se mantienen en el tercer lugar del índice de conflictividad, al representar 16% del total de las protestas registradas en julio, cuando los trabajadores manifestaron sus exigencias con acciones de calle en al menos 99 protestas, equivalentes a tres diarias.
