Licores adulterados han cobrado la vida de 190 personas en Venezuela
Ciento noventa muertes se registraron a causa de intoxicaciones por bebidas alcohólicas entre junio de 2018 y lo que va de 2019 a escala nacional, según un informe presentado el pasado 5 de agosto por la organización Ciudadanía en Acción.
Edison Arciniega, director de la ONG, atribuyó esta situación a la falta de control e implementación de políticas de parte del Estado en cuanto a la producción y comercialización de licores.
«Este tipo de intoxicaciones se deben fundamentalmente a la ruptura de las garantías de la inocuidad en los licores en Venezuela. A pesar de que tenemos una legislación en cuanto a las especies alcohólicas y en referencia a las normas de la Comisión Venezolana de Normas Industriales (Covenin)«, explicó Arciniega.
Según el experto en materia alimentaria, para la preparación de bebidas alcohólicas las mismas deben pasar por un proceso de destilado en el que se deben separar los alcoholes potables de los no potables pues solo los primeros son los que están aptos para la venta.
Hecho en casa
Los altos precios también han influido en el consumo de licores de parte de los venezolanos, en los últimos meses se ha popularizado la realización de productos «artesanales» que no están siendo supervisados por los organismos correspondientes.
«Más que bebidas artesanales, son bebidas ilegales que se producen bajo modos usos y costumbres. Si bien son hechas a baja escala, no cumplen con las normativas vigentes en Venezuela sobre la regulación de la producción de alcoholes de consumo humano», detalló Arciniega.
En el mismo momento en el que las normativas se incumplen, no estamos ante un licor artesanal, estamos ante un alcohol ilegal, afirmó.
«La ingesta de estos alcoholes de bajo costo y que los mismos se estén proliferando deja claro que hay una incapacidad del público a la hora de poder adquirir los productos certificados y de calidad que son los que producen las industrias nacionalizadas. Todo es consecuencia de la crisis económica y a su vez tiene trasfondo político», contó el especialista.
Entre el tipo de bebidas alcohólicas que se están realizando de esa manera se encuentran los destilados de cocuy, ron, las llamadas «guarapitas» e inclusive, anís.
«El Estado se hace la vista gorda al respecto. El organismo encargado del control del sector es el Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) y este ente solo parece interesado en controlar los alcoholes industriales que son los que pagan mayor impuesto, los alcoholes artesanales están exentos de los tributos», expresó Arciniega.
Para el vocero este hecho es alarmante pues califica estos licores son «letales» y pueden causar graves consecuencias en la salud de quienes lo ingieren, además de que considera que esto se puede evitar.