Rubén Limardo: “No quiero que nos vean como unos héroes”
Antes de llegar a los Juegos Panamericanos de Lima 2019, el campeón olímpico Rubén Limando se planteó un objetivo claro: conquistar la medalla de oro. Y lo logró.
El espadista dorado nuevamente se citó con la historia al imponerse en la final ante su hermano menor Jesús, con un ajustado marcador de 15-8, para lograr así el uno-dos para Venezuela.
A pesar de haber alcanzado su tercer metal dorado en este tipo de competiciones aun con algunas lesiones, el bolivarense más que celebrar, no dudó en levantar la voz en torno a la situación que están pasando muchos de sus compañeros atletas.
Y es que de acuerdo a lo expresado por el bicampeón panamericano, “la falta de planificación y organización”, han traído como consecuencia que Venezuela ocupe el lugar en el que se encuentra en el medallero.
“Quiero solidarizarme con mis compañeros por la situación que están pasando. Por todo lo que está pasando el deporte venezolano. No quiero que nos vean como unos héroes, porque yo no le estoy salvando el cupo a nadie”, manifestó con autoridad el esgrimista, tras finalizar el combate.
Limardo quien no dudó en dedicar el triunfo y la medalla al país, quiso colocarse en el lugar de algunos de sus compañeros que han tenido que sortear algunos obstáculos a lo largo de estos Juegos Panamericanos. Tal como sucedió como la nadadora Paola Pérez, quien sufrió hipotermia al nadar la prueba de los 10Km de aguas abiertas con un traje convencional y no de neopreno, dado que no contó con la dotación e indumentaria necesaria para poder competir.
“No podemos seguir permitiendo que pasen este tipo de cosas. Si el campeón olímpico pasa por situaciones difíciles, imagínense que dejará para los atletas que no lo son. Ya es hora de que se quiten las manos de los ojos, porque el deporte venezolano no merece esto. Es momento de que nuestro deporte siga avanzando y siga proyectándose. No queremos seguir botados en el medallero”, aseveró.
De la misma manera hizo gran hincapié en la importancia que tienen los atletas amateur, dado que “somos quienes damos las medallas en este tipo de competiciones”.
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Limardo exhortó a las autoridades deportivas a tomar cartas en el asunto, dado que asegura que es el momento en el que el deporte debe experimentar un cambio, “un cambio para bien”.
Reconoció además la existencia de una especie de tensión en la Villa Panamericana, dado que muchos de los atletas criollos se han mostrado descontentos y tristes por la situación que vive la delegación, dado que no cuentan con el apoyo para resolver las cosas. “Con una planificación y organización se puede llegar a donde se quiere. Así lo hemos demostrado nosotros”.
Sangre y casta de campeón
Ni la molestia que sentía en la rodilla derecha, ni la lesión que sufrió hace poco en el codo izquierdo fueron motivos para que Rubén Limardo diera lo mejor de sí en la pedana y así lo demostró. “Así todo remendado sigo luchando por mi país”, dijo.
Pese a las dolencias físicas, el campeón olímpico de Londres 2012, hizo valer su jerarquía para frenar al menor de la dinastía Limardo quien avanzó hasta el combate final invicto.
“Estoy contento por él. Sabía que no sería una final fácil, me relajé mucho y la verdad no me importaba el score. Él se descontroló. Soy una persona de retos y récords y quiero que la historia me recuerde como el Limardo que hizo historia”, enfatizó.
Sobre la actuación de su hermano Jesús, solo tuvo elogios, dado que en su primera incursión en este tipo de cita logró una medalla de plata.
“Estoy orgulloso de él por todo lo que ha logrado. Yo cuando competí en mis primeros Panamericanos apenas hice un octavo lugar y gané una medalla de plata por equipos. Él ya tiene una medalla de plata individual. Esta es la segunda final histórica entre dos hermanos”, detalló, tras rememorar la final que protagonizaron hace más de mes y medio en lo que fue Campeonato Panamericano de Canadá.
@SamirJJimenez