Bayer cesó operaciones en Caracas y seguirá en el país solo con importaciones
En medio de la actual coyuntura en la que, según el gremio industrial, se han perdido más de 400 empresas en el primer semestre del año, la alemana Bayer anunció el cese de operaciones de su planta de productos farmacéuticos y químicos ubicada en La Trinidad, en el este de la ciudad de Caracas.
No obstante, Bayer indicó a través de un comunicado que seguirá funcionando en Venezuela, a través de la importación de sus líneas de medicamentos oncológicos, antibióticos, para enfermedades cardiovasculares, anticonceptivos y agroquímicos, como parte de un «nuevo modelo de negocios«.
Bayer Andina, la filial que reúne las operaciones de Centroamérica, Caribe, Colombia, Perú, Ecuador y Venezuela, informó que, además, se mantendrán activas las divisiones de medicamentos con prescripción, protección de cultivos y semillas certificadas, por lo que aseguró que el consumidor local podrá contar con estos productos de manera regular.
La empresa señaló que la decisión del cese de la planta en Caracas se fundamenta en el cumplimiento de las leyes locales e internacionales, sus valores corporativos y la Responsabilidad Social que rige todas sus acciones.
Asimismo, Bayer sostuvo que seguirá evaluando la realidad de mercado y tomará las decisiones necesarias para mantener la sostenibilidad de la empresa.
Versión sindical
Sin embargo, el secretario general de la Federación Nacional de Sindicatos de Trabajadores de Productos medicinales, cosméticos y perfumería (Fetrameco), Avilio Echenique, declaró al portal Aporrea que el cierre se produjo efectivamente el pasado 20 de julio, y afecta a aproximadamente 200 trabajadores, quienes recibieron una «cajita feliz» como compensación de despido.
Aunque Echenique, un sindicalista afecto al oficialismo, dice que el cierre fue inconsulto e ilegal, reconoce que la empresa solo estaba fabricando tres productos farmacológicos de los 70 que se podían manufacturar en la planta. El dirigente cuestiona la «lógica de rentabilidad capitalista» del ajuste de portafolio que hizo la empresa, el cual privilegió líneas que, según el gremialista, no se corresponden con las prioridades de la población.
Es posible que el Ministerio del Trabajo intervenga la planta en los próximos días, según pudo conocer Banca y Negocios a última hora, ya que el Fetrameco hizo la solicitud y se espera que los trabajadores se mantengan movilizados alrededor de la fábrica.
Industria paralizada
El 70% de las empresas químicas en Venezuela están prácticamente paralizadas. Así lo afirma Álvaro Silva, presidente de la Asociación Venezolana de la Industria Química y Petroquímica (Asoquim), quien precisa que estas empresas utilizan menos del 10% de su capacidad productiva.
De acuerdo con la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria) la capacidad operativa del sector industrial venezolano se ubica actualmente en apenas 18%, por debajo de países como Colombia, que cuentan con un 81% de capacidad industrial instalada, Brasil, que cuenta con 78% y Argentina que registra un 57,7%.
Conindustria señala que, según la Encuesta de Coyuntura Industrial correspondiente al primer trimestre de 2019, 96% de las empresas encuestadas produjeron menos, mucho menos, o no produjeron nada, mientras que solo 2% produjo lo mismo y 2% produjo más.
El gremio industrial estima que en los últimos 20 años han cerrado más de 10.000 industrias y actualmente solo quedan 2.500 empresas en el país, de las cuales 68% podrían desaparecer en un período no mayor a un año de no darse un cambio político que mejore las condiciones actuales que limitan la producción y el desempeño de la actividad industrial.
