Trump impone sanciones al líder supremo de Irán
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, impuso este lunes «duras» sanciones al líder supremo de Irán, Ali Jameneí, mientras insistía en su oferta de negociar con él y advertía de que su «contención» ante las tensiones en el golfo Pérsico no durará para siempre.
Las nuevas restricciones financieras afectan a Jameneí, su oficina y a ocho comandantes de la Guardia Revolucionaria iraní, y esta semana se ampliarán para golpear al ministro de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, según el Departamento del Tesoro.
«Seguiremos aumentando la presión a Irán. No pueden tener nunca una arma nuclear», dijo Trump a los periodistas antes de firmar un decreto con sanciones.
«No buscamos un conflicto con Irán ni con ningún otro país. Creo que hemos demostrado mucha contención, pero eso no significa que vayamos a demostrarla en el futuro», avisó.
La semana pasada, tras el derribo iraní de un dron estadounidense en el golfo Pérsico, Trump aseguró que había frenado un plan de ataque selectivo contra Irán que -de acuerdo al Pentágono- habría dejado unos 150 muertos, un balance que el mandatario no consideró «proporcionado» respecto a la pérdida del avión.
Trump usó esa misma palabra, «proporcionadas», para describir hoy sus nuevas sanciones a Irán, aunque matizó que las impuestas contra Jameneí y su entorno ya estaban preparándose antes del derribo del dron, mientras que algunas de las emitidas por el Tesoro sí que constituyen una represalia por ese incidente.
Estados Unidos también ha respondido al abatimiento del dron en el plano cibernético, al lanzar el pasado jueves una ofensiva que inutilizó los sistemas de computadores empleados en el control de cohetes y misiles de Irán, y que las autoridades iraníes han calificado de «grave error».
Poco antes de rubricar el decreto contra Jameneí, Trump le tendió de nuevo la mano para negociar con él una salida a las tensiones, una oferta que el líder supremo iraní ha rechazado hasta ahora.
«Nos encantaría poder negociar un acuerdo si ellos quieren (…) Deberían (decidirlo) pronto», señaló el mandatario.
Preguntado por cuál es su mensaje para el ayatolá, Trump esgrimió uno muy similar al que suele dirigir al líder norcoreano, Kim Jong-un, para alentarle a seguir negociando con él: «(Jameneí) tiene el potencial de tener un gran país, y pronto, muy pronto».
Las sanciones impuestas contra Jameneí bloquean «cualquier propiedad e intereses» que pueda tener bajo jurisdicción de Estados Unidos, y también afectan su oficina y a cualquier persona que el Tesoro decida que es conveniente castigar por su papel como «funcionario estatal de Irán», detalla el texto del decreto.
El secretario del Tesoro de EE.UU., Steven Mnuchin, adelantó en una conferencia de prensa que esta misma semana se impondrán sanciones a Zarif, un hecho significativo dada la relevancia de ese funcionario en los esfuerzos de varios países europeos por salvar el acuerdo nuclear de 2015, del que Trump se retiró el año pasado.
Aunque no está claro si Jameneí y su entorno tienen activos bajo control estadounidense, Mnuchin subrayó que el Tesoro «sigue el dinero» para garantizar que sus sanciones sean «altamente eficaces».
«Estamos dispuestos a levantar las sanciones en algún momento, si (los iraníes) están dispuestos a negociar», indicó Mnuchin.
Además de las sanciones contenidas en el decreto de Trump, el Tesoro impuso restricciones financieras a ocho comandantes iraníes como respuesta a las recientes tensiones en el golfo Pérsico, especialmente en el estratégico estrecho de Ormuz y en el mar de Omán, donde este mes sufrieron ataques dos buques cargueros.
Entre los sancionados está el comandante de la Fuerza Naval del Cuerpo de los Guardianes de la Revolución, Ali Reza Tangsirí, quien lidera la «estructura responsable del sabotaje de barcos en aguas internacionales», según un comunicado del Tesoro.
También figuran Amirali Hayizadeh, comandante de la división aeroespacial de los Guardianes de la Revolución iraní, «cuya burocracia fue responsable del derribo» del dron de EE.UU.; y Mohamad Pakpur, comandante de la fuerza terrestre de ese cuerpo de elite, por sus acciones en Siria, detalla el Tesoro.
Además, quedan sujetos a las restricciones los comandantes de los cinco distritos navales de los Guardianes de la Revolución -Abás Gholamshahi, Ramezan Zirahi, Yadollah Badin, Mansur Ravankar y Ali Ozma’i- responsables de las operaciones navales en provincias costeras como Bushehr, adyacentes al estrecho de Ormuz.