De baby shower a boda: hija de Valentina Quintero se casó
Con ocho meses de embarazo, Arianna Arteaga, hija de la periodista venezolana Valentina Quintero, sorprendió este fin de semana a sus familiares y amigos cercanos durante el baby shower de su primogénito. Y es que, la joven fotógrafa aprovechó la oportunidad para casarse con su novio de hace cuatro años, Gabriel Cárdenas.
La feliz pareja se dio el “Sí, acepto” este sábado 15 de junio, durante un evento privado en la casa de Quintero- su madre-, rodeados de familiares y amigos cercanos, quienes jamás se imaginaron que ese día serían testigos de la unión entre Arteaga y Cárdenas, ya que todos pensaban que solo se trataba de la fiesta que se hace antes del nacimiento del bebé.
“Así que en medio del sarao por el bebé, lanzamos el batacazo de bienvenidos a nuestra boda con palabras de la abuela anfitriona emocionada. Fue una oda a la familia, al amor, a los rituales bonitos, a la felicidad absoluta”, escribió Arianna en su cuenta en Instagram, donde también compartió en las historias varias imágenes del emotivo evento.
“Los invitados casi se mueren cuando supieron que era boda y no merienda celestial, tanto que cantaron la marcha nupcial en coro desafinado, amoroso y espontáneo”, explicó. Asimismo, detalló que dos semanas fueron suficientes para hacer realidad la sorpresa. El encargado del casamiento fue el alcalde del municipio Chacao, Gustavo Duque.
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Por su parte, la orgullosa madre de la novia, usó su cuenta en la misma red social, para contar como fue que ella organizó e hizo posible que este sueño. A través de varias historias, Quintero contó que todo comenzó el 7 de mayo por un grupo de whatsapp.
Ya el compromiso estaba listo, recordemos que Arianna y Gabriel se propusieron matrimonio el pasado 18 de mayo del año en curso, algo que ya habían hecho en varias oportunidades, pero jamás se habían atrevido a dar el gran paso para vivir esa nueva aventura.
Como encargada del evento secreto, la periodista buscó desde la persona que casaría a los novios hasta los pasapalos que disgustarían los invitados. «Organizar un matrimonio sorpresa es la gozadera radical. Mantener el secreto siendo periodista de oficio y víscera es un reto crucial. No lo sabían ni siquiera el papá de Gabo», escribió la feliz madre.
«Mis hijos amados Arianna y Gabriel, ahora que serán familia quisieron formalizar el compromiso. Firmar el amor. Legalizar la convicción de futuro en su país. Confieso que los admiro. Que los apoyo en cuanto decidan. Quiero ser la madre, la suegra y la abuela perfecta. Enmendar todos los desaguisados que cometí como mamá aunque no me arrepienta de ninguno», expresó tras la boda.
