Nadal y Federer acuden a su cita en semifinales
La victoria de Nadal y Federer establece el 39º encuentro de carrera entre los legendarios tenistas. Rafael y Roger sellaron su cita en las semifinales de Roland Garros, tras solventar sus duelos contra Kei Nishikori y Stan Wawrinka.
Era el duelo que todo el mundo esperaba en esa parte del cuadro, una nueva oportunidad para el helvético. que cumplirá 38 años este agosto, de derrotar al español en su torneo favorito, el que aspira a ganar por duodécima vez para extender su dominio más lejos que ningún otro tenista ha hecho en ninguno de los cuatro grandes.
El próximo viernes, la central de París vivirá su primer enfrentamiento desde la final de 2011, el sexto en total en este escenario, y el segundo en la penúltima ronda.
Un duelo que atrae toda la atención, porque está lleno de leyenda, ya que se ha repetido 38 veces, con 23 triunfos para el español y 15 para el helvético.
El suizo Roger Federer se clasificó para las semifinales de Roland Garros al derrotar a su amigo y compatriota Stan Wawrinka, 7-6(4), 4-6, 7-6(5) y 6-4 en tres horas y 35 minutos, y se medirá por un puesto en la final contra el español.
En la reedición del último duelo que había disputado Federer sobre la tierra batida de París antes iniciar una tregua de tres años con el torneo, el helvético logró clasificarse por octava vez para semifinales, 44 si se cuentan todos los Grand Slam.
Contra su amigo Wawrinka, frente al que ha jugado cuatro veces en Roland Garros, permitió su primer set este torneo, en un duelo que durante algo más de una hora estuvo suspendido por una fuerte tormenta.
Federer se tomó la revancha de aquel partido de 2015, también en cuartos de final, que le apeó del torneo tras el que inició una etapa en la que dejó de lado el Grand Slam de tierra.
Por su parte, Rafael Nadal aplastó al japonés Kei Nishikori (6-1, 6-1 y 6-3) en una hora y 51 minutos, para lograr por duodécima vez las semifinales de Roland Garros, una ronda a partir de la cual nunca ha perdido sobre la tierra batida parisiense.
Fue una faena quirúrgica, rápida y contundente, tanto que acabó antes que el otro duelo de cuartos, que había comenzado antes, y del que saldría su rival para la semifinal, entre los suizos Roger y Stan.