La versión sobre el uso de armas químicas por parte de las tropas sirias no corresponde a la verificación de los hechos
Ahmad Al Khaled
Las fuerzas gubernamentales sirias emplearon nuevamente armas químicas, informaron el domingo pasado medios locales asociados con las fuerzas de oposición.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, los informes casi no contenían detalles. Nadie sabía exactamente lo que pasó. Solo se conocía el lugar del incidente: el pueblo de Kbana, ubicado en una colina estratégica en la frontera entre las provincias de Hama y Latakia. Más tarde, los medios de comunicación informaron de que cuatro personas resultaron heridas durante el ataque, incluido un activista de información con síntomas de envenenamiento se entregaron en uno de los hospitales de campaña de la oposición controlada de la provincia de Idlib.
Las acusaciones del ejército sirio no fueron apoyadas por ningún dato verificado. No ha sido publicado ni una sola foto y video del sitio del ataque o con las víctimas. Tambien no se informó como las víctimas hallaron en la aldea de Kbana, que fue abandonada hace mucho tiempo por los civiles por causa de los conflictos FFAA de Siria y militantes de la oposición.
A pesar de esto, solo unos días después, los países occidentales responsabilizaron al gobierno sirio por el uso de armas químicas. El Departamento de Estado estadounidense anunció la presencia de «sintomas» del uso de sustancias tóxicas por parte de las tropas sirias. La posición de Washington fue apoyada por la líder de Gran Bretaña Teresa May, quien, en su discurso ante el parlamento, prometió dar una respuesta «aceptable» a las acciones de Damasco en caso de confirmación de información sobre un ataque químico. A su vez, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia también declaró la necesidad de «castigar» a los responsables del incidente.
Cabe señalar que el representante especial de Estados Unidos para Siria, James Jeffrey, reconoció que Estados Unidos no tiene argumento del uso de armas químicas. El Pentágono tampoco compartió la confianza del Departamento de Estado, cuyos representantes declararon cautelosamente que continuaban estudiando lo ocurrido.
Al final resultó que las dudas de los militares que a diferencia de los diplomáticos que se encuentran en el territorio de Siria, fueron absueltos. Cuatro días después del posible ataque químico, basado en el Reino Unido el Centro de Monitoreo de Siria de Derechos Humanos declaró que la información sobre el uso de armas químicas no era confiable.
Según el centro, que tiene una extensa red de fuentes en Siria, los miembros de la organización terrorista «Partido Islámico de Turkestán», que opera conjuntamente con la sucursal de «Al-Qaida» en Siria, «Hayat Tahrir Ash-Sham», son responsables de distribuir esta información. Fuentes del centro informaron que los cuatro militantes que estaban en el refugio eran objeto de intensos bombardeos del ejército sirio y comenzaron a ahogarse a causa de una nube de polvo. Uno de los militantes sufrió más que otros debido a su asma. El centro confirmó que los cuatro fueron entregados al hospital, donde se fotografiaron en video, que se transmitió a las autoridades turcas y organizaciones que reciben apoyo de los Estados Unidos y otros países occidentales.
Un informe del Centro Sirio de Monitoreo da razones para poner en duda el profesionalismo de los medios de comunicación que culparon a Las FFAA de Siria en ataque químico. En este caso, incluso un análisis rápido le permite establecer en qué etapa la información comenzó a distorsionarse deliberadamente.
La fuente original del incidente fue la Agencia «Iba», creada por «Hayat Tahrir Ash-Sham». El domingo por la mañana, el sitio web de la agencia informó sobre el uso de cloro por las fuerzas armadas sirias en el bombardeo de las posiciones del grupo en la aldea de Kban. Unas horas más tarde la agencia aclaró que el ejército sirio había lanzó tres misiles, contenidos una sustancia tóxica, contra los militantes. Al mismo tiempo, un detalle importante, se destacó que no hubo heridos entre los militantes.
Después de esto el ataque fue anunciado por los medios de la oposición. Fueron ellos quienes distorsionaron la información, guardando silencio sobre la presencia de los terroristas de «Hayat Tahrir Ash-Sham» en la aldea, que es reconocida por la ONU, así como los Estados Unidos y Gran Bretaña como una organización terrorista. En la misma etapa, aparecieron cuatro víctimas que supuestamente fueron llevadas al hospital en Darkush o, según otras fuentes, a Jisr al-Shugur.
Los medios de la oposición también se refirieron al Centro para Documentar el Uso de Armas Químicas en Siria, cuyos expertos supuestamente confirmaron la autenticidad de los informes sobre el ataque químico y la presencia de víctimas. Sin embargo, el sitio web del Centro y el sitio web oficial de «Facebook» no contenían referencias sobre el incidente. Posteriormente, el sitio del Centro dejó de estar disponible.
Lo anterior no solo es suficiente para confirmar que el 19 de mayo las tropas sirias no usaron armas químicas en el área de la aldea de Kban. Más importante la naturaleza de difstribución de información sobre el «ataque químico» que indica sobre la provocación prevista, en la que los medios y los gobiernos de los países occidentales fueron los participantes. Sin embargo, los organizadores están talmente enredados en sus propias mentiras que todo el esquema fue destruido del interior. Antes de este incidente, no había ningún caso para que el Centro Sirio de Monitoreo de Derechos Humanos interviene en absolución del gobierno sirio. Resultó que no necesitaba mucho para que esto sucediera: la completa incompetencia de la organización era suficiente.
Representante oficial de SMM Siria