España se ofrece a ayudar con la recuperación del sistema eléctrico nacional
España ofreció ayuda a Venezuela para resolver la crisis eléctrica que se generó por el colapso de la red y generó un apagón nacional el pasado 7 de marzo que se ha extendido hasta este 12 de marzo, cuando todaía zonas del país se encuentran a oscuras.
En declaraciones a la cadena radiofónica española SER, el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, expresó su preocupación por la caída de la red eléctrica. «España estaría dispuesta -aseguró- a ver si podemos aportar ayuda para resolver este gravísimo problema».
Borrell explicó que este lunes se puso en contacto con representantes de la oposición venezolana y les animó a «hacer una llamada a la ayuda internacional a ver cómo se puede ayudar a estabilizar el sistema eléctrico».
Según el ministro, resulta obvio que se debe «a un problema de fondo de la propia red», ya que el sistema eléctrico venezolano «está muy deteriorado por falta de mantenimiento y tiene averías sistémicas«.
«Ahora es el sistema de luz, pero pronto puede ser el sistema de agua, es un momento complicado y se puede provocar una situación extremadamente grave», alertó.
Dispuestos a recibir al chavismo
El ministro también reveló conversaciones entre España y Estados Unidos sobre la situación de Venezuela y la posibilidad de que, llegado el caso, altos cargos del gobierno de Nicolás Maduro que decidieran abandonar el país acabaran siendo acogidos en terceros, incluido España.
«El planteamiento no se concretó en nada», aseguró Borrell, quien habló con el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, y con el consejero de Seguridad Nacional, John Bolton.
Si llegara a precisarse dicha propuesta, dijo Borrell, «la estudiaríamos, pero habría que bajar de las musas al teatro y saber de qué, quién, cómo y cuándo estamos hablando».
Al ser preguntado por la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de retirar a todo el personal de la Embajada estadounidense en Caracas, Borrell lo vinculó a estos problemas de suministros y señaló que «no afectará solo al personal de la Embajada de Estados Unidos sino a todos los ciudadanos».