Familias afectadas por lluvias en Carayaca sólo reciben bolsas de comida y colchones por parte del Gobierno
Marighzell Lucena – Vargas.-
@mlucena15
A más de 8 días de haber resultado afectados por las fuertes precipitaciones, la ayuda oficial que han recibido las comunidades de Tarmas y Puerto Carayaca, al oeste del estado Vargas, sólo se limita a unas bolsas de comida y colchones; mientras que de las 15 familias que quedaron damnificadas, sólo una ha sido reubicada en un refugios, pues en algunos casos se niegan a abandonar lo que queda de sus viviendas y enseres.
Loyda Mayora, residente de Tarmas, explicó que muchas de las familias cuyas viviendas resultaron afectadas parcialmente, o en menor proporción, pretender ser movilizadas a refugios, ante lo cual, la mayoría ha decidido permanecer en casas de conocidos o cercanos, para no abandonar sus bienes. “Hay muchas pérdidas parciales y nos quieren igual llevar a refugios. Somos la mayoría y no queremos abandonar nuestras casas, ya que podemos recuperar lo afectado así sea por nuestros propios medios”, dijo.
Advierte que aun cuando la vialidad hacia la localidad de Tarmas se encuentra despejada, hay un solo vehículo prestando servicio y se requiere de la limpieza de las cuencas y múltiples quebradas que prevalecen en la zona. “Pedimos que hagan la limpieza de las cuencas y quebrada con urgencia, el mal tiempo sigue y de volver a llover con la misma intensidad la desgracia puede ser mayor”, enfatizó Mayora.
Por su parte, Raynier Blanco, indicó que la preocupación y la posibilidad de volver a quedar incomunicados prevalecen ante las condiciones climáticas inestables y considerando que ante los deslizamientos de tierra, los escombros y sedimentos sólo fueron colocados a un lado. “Todo lo que cedió fue arrimado al cerro, y de volver a llover con la misma intensidad, todo volverá a obstruir la carretera. Sólo bolsas de comida y colchones ha sido la única ayuda otorgada por el gobierno regional, mientras que las autoridades locales apoyaron con el despeje de la vialidad.
Varias organizaciones civiles, fundaciones no gubernamentales y equipos de voluntarios, incluyendo personal médico, se han dado a la tarea de brindar apoyo a las comunidades afectadas en la parroquia Carayaca.
Requieren agua potable
Los afectados en la localidad de Puerto Carayaca demandan el suministro de agua potable e insumos para mantenerse hidratados, teniendo en consideración que la mayoría debe permanecer en la zona en resguardo de sus bienes. Miguel Acosta, es un trabajador portuario, que perdió una unidad de transporte público, con la cual se ayudaba para la obtención de sus ingresos familiares. Junto con el autobús, otros cuatro vehículos de la familia también resultaron con pérdida total ante la crecida de la quebrada el domingo 14 de octubre.
“Aquí estoy que no sé qué hacer. El Alcalde de Vargas, me ofreció su apoyo pero no tengo nada concreto. Estoy preocupado porque con el autobús, mejoraba los ingresos porque con sueldo mínimo se hace muy poco. En 28 años que tengo viviendo aquí, jamás pensé vivir una situación así. Hay muchos niños afectados, además de agua también se requiere ropa para quienes tienen pérdida total”, dijo Acosta.
Al igual que en la localidad de Tarmas, a Puerto Carayaca llegó la misma ayuda oficial y la promesa de buscar una solución habitacional, una vez que los afectados sean trasladados a los refugios. Advierte la comunidad que la inseguridad se ha apoderado de la zona y han venido sacando provecho a la situación, robando los enseres y bienes que aún quedaron en buenas condiciones en varias de las viviendas afectadas parcialmente.
La comunidad carece de la presencia de efectivos de la GNB o policiales, por lo cual ellos mismos se han tenido que organizar para garantizar la seguridad de sus pertenencias. “Los robos se han incrementado ante lo cual muchos nos negamos a abandonar nuestros hogares”, sentenció.
