Economía

Cambio cachama por topocho!!!

El Universal publicó el lunes 5 de julio de 2010 una nota de prensa titulada “Para combatir al capitalismo el Gobierno impulsa el trueque”. En esta nota de prensa parafraseando al jefe del Ejecutivo Nacional y haciendo mención a la Ley Orgánica de las Comunas, se justifica el fomento, apoyo e incluso imposición del trueque debido a que “es la única manera de romper con el capitalismo desde abajo”.

Las monedas vienen siendo acuñadas y utilizadas desde hace cientos de cientos de años antes de Cristo. Por este simple hecho, realizar la aseveración de la sustitución de las transacciones de mercado a través del uso de monedas como medio de pago, unidad de cuenta y medio de cambio, por un sistema de trueque, para aniquilar el capitalismo, resulta disonante, estridente e ingenuo, sino un insulto a la inteligencia.

Adicionalmente, el trueque dio paso a las relaciones entre los agentes económicos a través de monedas debido a las enormes deficiencias de la primera forma de intercambio que requería de doble-coincidencia para que efectivamente se concretara una transacción. Una persona que oferta una cachama queriendo cambiarla por un racimo de topocho, requerirá que el propietario de un racimo de topocho esté en búsqueda de una cachama, porque de lo contrario no se realizará transacción alguna.

Luego, debido a la aparición de las monedas en contraposición del trueque se logró subsanar la debilidad que implica la no existencia de doble-coincidencia, lo que permitió a las personas cambiar bienes o servicios por monedas y atesorar en ellas valor de cambio para consumos futuros y satisfacción de consumo futuro. Prestemos atención a esta cualidad de las monedas y del dinero en contraposición al trueque. El hecho de atesorar monedas no tiene porque implicar atesorar excedentes sino apertrecharse para el consumo futuro –la vida no es un juego de un único periodo-. Adicionalmente, si una persona solo produce bienes perecederos, y solo producirá el equivalente para con suerte (doble-coincidencia) satisfacer sus necesidades, la sociedad no contará con ahorros ni podrá satisfacer las necesidades de masa, condenando a sus ciudadanos a una situación de supervivencia, hambruna y carencia de bienes y servicios. Esta miopía de imposición del trueque, destruirá los beneficios sociales derivados de la especialización, la división del trabajo y de las economías de escala que beneficiaron a la masificación de la producción, la satisfacción de necesidades de las mayorías y la industrialización de los países. En todo caso que tiene de malo los excedentes y la acumulación de medios de cambio como el dinero, si el ahorro constituye uno de los elementos fundamentales para el crecimiento y el desarrollo económico.

Incluso, se ha podido escuchar a personeros públicos despotricando de la división del trabajo, como si fuese posible hoy día retornar a un sistema económico primitivo de subsistencia y autárquico.

Más allá, en el trueque, tratándose de bienes privados, es decir que su uso o consumo implica la exclusión de otra persona por quien lo disfruta, se requiere igualmente de la propiedad sobre los bienes. Lo anterior resulta interesante, porque se le está achacando a la moneda o al dinero como medio de cambio la cualidad definidora del capitalismo, lo que implica una ignorancia y una barbarie sin presente. En la historia de la humanidad ha existido la moneda sin que existiera el sistema capitalista de producción.

En un sistema de trueque donde se transan bienes privados, existe mercado y propiedad privada, por lo que no estarían aboliendo nada salvo los beneficios de los mercados profundos y amplios por medio del uso del dinero.

Economistas como Nobuhiro Kiyotacki y Randall Wright han desarrollado un papel de trabajo donde demuestran que el dinero como medio de cambio constituye una institución social y un bien social que incluso aparece de forma endógena. En ausencia del dinero fiduciario de curso legal, aparecerá un bien con las características intrínsecas suficientes como para fungir como medio de cambio e incluso reserva de valor. Lo anterior implica que la propuesta del trueque o de monedas de restringido curso legal, pretendiendo prohibir su ahorro y atesoramiento apunta, como la mayoría de las genialidades diseñadas por el Ejecutivo y la actual Asamblea Nacional, a lesionar a la sociedad venezolana y retrocederla a cientos de años atrás.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba