La “guerra comercial” entorpece, pero…
Jorge V. Ordenes-Lavadenz
Iniciar escaramuzas comerciales como las que viene retortijando el gobierno de EEUU en Canadá, México y Europa son contraproducentes aunque la “guerra comercial” con la República Popular China responde a la manera supuestamente irresponsable en que ésta ha menoscabado a otros países recurriendo a prácticas cuestionables que son posibles por las elevadas cuantías de comercio de un país-mundo de 1,3 mil millones de habitantes y un Producto Interno Bruto (PIB) de $2,4 billón de billones (trillones en inglés). Ingresó a la Organización Mundial de Comercio (OMC) en 2001 y hoy se dice que se ha dedicado a sonsacar tecnología y métodos de producción a compañías occidentales como condición de ingreso al mercado chino… contraviniendo reglas de la OMC. China es un Estado socialista de partido único con economía de mercado que controla el aparato productivo que si bien en alguna medida es privado, su albedrio se limita a lo microeconómico cuya ejecución de todas maneras necesita el escrutinio y visto bueno del régimen que controla los márgenes de ganancia y costos Incluyendo los cambios de valor del renminbi.
Según el WP, el economista David Autor y sus colegas recientemente estimaron que el impacto del “trauma Chino”, o de las exportaciones chinas a EEUU, causó la pérdida del 25% de empleo manufacturero de EEUU de 1990 a 2007. Recientemente China condicionó el ingreso de compañías como Google, Facebook y Amazon. La verdad es que los bancos extranjeros están obligados a funcionar con socios locales que aportan poco o nada, lo que más bien significa un gravamen adicional al inversionista extranjero. Las compañías extranjeras están obligadas a compartir tecnologías con empresas locales que aprenden, y comercializan lo aprendido, sin contemplación alguna. A esto hay que añadir el hurto de sistemas cibernéticos. El WP destaca que el usurpador mayor no es Rusia sino China… que extrae secretos infringiendo la propiedad intelectual de empresas estadounidenses. Añade que Brasil e India le están siguiendo los pasos. Habrá que ver.