Macron convoca una reunión en el Elíseo sobre el atentado yihadista
El presidente francés, Emmanuel Macron, reunió este sábado a miembros de su Gobierno y a responsables de las fuerzas de seguridad para tratar sobre los ataques perpetrados el viernes por un terrorista en Carcasona y Trèbes (sur del país), en los que asesinó a cuatro personas e hirió a una quincena.
Fuentes del Elíseo indicaron que este consejo restringido de defensa está consagrado de forma exclusiva a la situación generada por la acción de Radouane Lakdim, quien fue abatido por el Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional (GIGN) en el supermercado de Trèbes donde se había hecho fuerte y había tomado rehenes.
A la reunión, en la que se hará un repaso del estado de los heridos, de la operación del GIGN y de los preparativos para rendir homenaje a las víctimas asistirán, entre otros, el primer ministro francés, Edouard Philippe, y el titular de Interior, Gérard Collomb, según el canal BFMTV.
Ambos han sido las caras visibles del Ejecutivo en esta crisis, junto a Macron, que hoy rindió homenaje al teniente coronel de la Gendarmería Arnaud Beltrame, quien se intercambió por una rehén que había tomado Lakdim en el supermercado y que murió anoche a causa de las heridas que le causó el terrorista.
El jefe de Estado lo calificó de “héroe”, dijo que había mostrado “un valor y una abnegación excepcionales” y subrayó que “merece el respeto y la admiración de toda la nación”.
Los investigadores tratan de determinar si el yihadista, de 25 años, tuvo cómplices y han arrestado a dos personas de su círculo más próximo, su novia de 18 años y un amigo de 17.
La emisora France Info señaló que Lakdim, además de una pistola, tenía en su poder tres artefactos explosivos artesanales, que fueron encontrados junto al cuerpo sin vida del terrorista, después de que el GIGN entrara en el local.
Lakdim, quien en su ataque de ayer dijo ser un “soldado del Estado Islámico dispuesto a morir por Siria”, inició su periplo sangriento en Carcasona, donde disparó contra dos ocupantes de un coche para robarlo, mató a uno de ellos y dejó malherido al otro.
Luego, junto a un cuartel de policía atacó a cuatro agentes que volvían de una salida matutina para correr y alcanzó a uno de ellos, tras lo que se desplazó a un supermercado de Trèbes, a menos de una decena de kilómetros.
Al entrar al establecimiento mató a tiros a un empleado y a un cliente, antes de hacerse fuerte secuestrando a una mujer, por la que se intercambió el gendarme que acabó muriendo esta noche.
El de ayer fue el último ataque yihadista perpetrado en Francia desde el 1 de octubre, cuando un tunecino en situación irregular asesinó a puñaladas a dos jóvenes junto a la estación de trenes de Saint Charles, en Marsella (sureste de Francia).
