Mascotas en Egipto
Martha Rosenthal
@agendamagica
La zooarqueología es la ciencia que estudia los restos de animales antiguos y gracias a ella se ha logrado saber que las momias de esos animales enterradas en los distintos yacimientos de Egipto revelan extraordinarias pistas sobre los animales momificados que se han encontrado.
De algunos animales se encontraron sus restos óseos, otros muy bien momificados e inclusive algunos portaban máscaras de oro.
Bast es la diosa egipcia encargada de la protección del hogar y se representa como una mujer con cabeza de gato o leona, que siempre lleva un sistro, instrumento sonoro, otras veces es simplemente un gato erguido. En definitivamente, un felino.
El concepto bajo el cual se momificaban los animales era evitar que los muertos sintieran soledad y colocándole sus animales domésticos, mascotas, se sentirían acompañados. Hoy en día no varía mucho el concepto de tener mascotas en casa.
Pero no son sólo los gatos los preferidos, también se han encontrado multitud de ibis, el ave sagrada considerada benefactora la que se asocio a Thot, dios de la salud (2.500 a.C.). Escarabajos, carneros y hasta una gacela envuelta en papiro, amén de otros como peces y cocodrilos entre otros, se han encontrado y están parcialmente en el Museo del Cairo, pero también en poder de innumerables coleccionistas que, para tiempos pasados, eran los que patrocinaban los viajes a Egipto en busca de tesoros arqueológicos.
La egiptóloga Salima Ikram estableció la investigación sobre los animales que los egipcios conservaban, y nos dice:
Cuando ves esos animales, piensas: “¡Ah, el faraón Tal o Cual tenía una mascota, como yo!”, y en lugar de sentir una distancia de más de 5.000 años, ves a los antiguos egipcios como personas de carne y hueso.
