Calvin Klein sorprendió en la Semana de la Moda de Nueva York
Calvin Klein aparcó su distintivo minimalismo y sorprendió en la penúltima jornada de la Semana de la Moda de Nueva York con un ecléctico «collage» de referencias artísticas que contrastó con la opulencia multicultural de Naeem Khan.
El diseñador Raf Simons hizo «evolucionar» a Calvin Klein, casa de la que es director creativo, con una colección «libre» y llena de «mezclas» en sus prendas, inspiradas en el descubrimiento de América, la carrera espacial de los años 60 y la era de la información del siglo XXI, según indicó en una nota.
El desfile fue concebido como un espectáculo, algo que ya hacía intuir la densa capa de palomitas que cubría el suelo de la Bolsa de Nueva York, por donde pasearon entre «flashes» las actrices Nicole Kidman y Margot Robbie, entre otras caras conocidas.
La propuesta de la firma fue eminentemente urbana y destacaron los jerséis «oversize» con dibujos de los Looney Tunes, los vestidos holgados y largos tipo «La casa de la pradera» o asimétricos y con aberturas en el pecho, y detalles reflectantes en naranja y blanco casi calcados de un uniforme de bombero.
Entre graneros de madera estarcidos con fotografías de Andy Warhol y adornados con grandes pompones rojos, desfilaron seis decenas de propuestas para hombre y mujer que tuvieron en común las botas altas tipo pescador, a mitad de muslo, y los pasamontañas de lana de colores para abrigar la cabeza.
Para las féminas, además, ideó vestidos con tejidos de aspecto plástico en acabado plateado y rematados con encaje, o con «patchwork» en sedas semitrasparentes, aunque no renunció al sello minimalista de la casa en conjuntos unisex de camisa y pantalón con líneas simples, colores neutros y solapas frontales de color.
Mientras que Klein ha vestido a la considerada «realeza» de Hollywood y a celebridades desde Brooke Shields o Kate Moss hasta Gwyneth Paltrow o Beyoncé, Naeem Khan cuenta, de hecho, con algunas figuras monárquicas entre sus clientes, como Kate Middleton o Rania de Jordania, y políticas, como Michelle Obama.
El diseñador hindú-estadounidense confió en la artesanía para los bordados y los detalles en pedrería de sus piezas, que hacían constante referencia a las culturas latinoamericana o china y ensalzaban la feminidad con tejidos como el satén o el terciopelo.
En su carta de presentación, Khan afirmó haberse inspirado en la «nueva guardia de mujeres que están cambiando el paisaje de nuestra sociedad» y consideró su colección una celebración de las féminas a nivel global, «con todas su diversas experiencias de vida».
Ejemplo de ello fueron las modelos: una lució sobre su espalda las flores de un mantón de Manila que llevaba anudado al cuello, complemento de un conjunto de falda estilo sirena en satén carmesí y un corpiño negro con brillos.
Otras llevaron ricos atuendos de inspiración latinoamericana, reflejada en prendas similares al poncho, intrincadas pasamanerías de colores vivos, borlas y lentejuelas, así como bordados de flores presentes hasta en sombreros.
También se vieron un kimono negro con flores y cinto fucsia; pantalones de corte hindú en satén verde, con volumen a la cadera; monos de aire «sport» con bordados o sofisticados en estampado de leopardo y corte bombacho al tobillo.
Con un hilo musical que viraba entre clásicos de Madonna y la guitarra de Paco de Lucía en «Entre dos aguas», Khan deleitó al público con sus vestidos de noche de color joya con volumen en faldas y capas, y el último de ellos, en terciopelo negro, con una estatua de la libertad de lentejuelas a la espalda.
Otra de las firmas que acapararon miradas en esta quinta jornada de la NYFW fue BOSS, que presentó su última colección femenina bajo la dirección creativa de Jason Wu, ya que hoy se conoció que deja su puesto después de cinco años para centrarse en su propia marca.
En el desfile, que tuvo lugar en el espacio Cedar Lake, se vieron propuestas de aire minimalista y sobrio, como un traje de chaqueta y pantalón de cuadros en naranja sobre fondo negro, frente a vestidos de líneas simples en telas livianas de color blanco, azul índigo o negro