Que el mal caiga sobre aquel que piense mal
“Que el mal caiga sobre aquel que piense mal” es la traducción del lema de la orden de la jarretera en Inglaterra “Honni soit qui mal y pense” , que también aparece en el escudo de armas del Reino Unido.
Hay muchas versiones en cuanto a la aparición del lema, pero tal vez la más verosímil es la referida a algo que dijo el Rey Eduardo Tercero, en el siglo XIV. Se dice que el Rey bailaba con una muy noble dama y que la liga que ella tenía se deslizó hasta su tobillo, lo que causó la risa general de quienes estaban en el baile. El Rey tomó la liga en desagravio de la noble y se la colocó en la pierna, diciendo “Honni soit qui mal y pense“ . Poco después, creó la Orden de la Jarretera (u Orden de la Liga), conocida como (The Most Noble Order of the Garter), la condecoración que hasta el día de hoy es la más importante del Reino Unido y que se confiere a muy pocas personas que se consideren dignas de ella.
La intención que tuvo el Rey Eduardo iba dirigida a todos aquellos que pudieran tener malos pensamientos en cuanto a un simple hecho. Hoy en día, en Venezuela, son muchos los que tienen malos pensamientos en cuanto a lo que dicen voceros del gobierno y/o de la oposición, sobre los cuales pueda recaer . el mal. Así, por ejemplo, cuando Diosdado Cabello declara públicamente que dentro de una semana el gobierno va a comprar a Banesco por un precio muy barato, hay quienes piensan que es él o un testaferro suyo quien va adquirir las acciones de Escotet. No averiguan si realmente hay negociaciones sino que piensan todo lo malo. Cuando, por las redes sociales se afirma que la prohibición de Maduro de todo el tráfico aéreo y marítimo hacia o desde Aruba, Curazao y Bonaire, es porque no quiere que se vea un barco que está colocando un tendido de cable submarino para transmisiones de internet y telefonía, desde Cuba a Paraguaná para beneficio de Putin y Rusia. O más aún, cuando se afirma que la explosión en el mar notificada por tres aeronaves era la de un barco que venía cargado de misiles rusos para Maduro tal como fue en el caso de los misiles que Jruschov enviaba por barco a Cuba, que Kennedy impidió oportunamente.
No se trata, para los venezolanos, de desear que el mal caiga sobre quienes piensen mal, ya que no es cristiano desearle el mal a alguien, sino de advertirles que deben tener cuidado con lo que piensen cuando les lleguen noticias no corroboradas. Al pensar mal, hacen mal y pueden hacer que mal recaiga sobre ellos.
