El deporte pacta con el diablo: Federer y Ginóbili, en la mesa de negociación
Superar la treintena, incluso la cuarentena, ha dejado de ser un problema para los deportistas: Roger Federer, Manu Ginóbili, Valentino Rossi, Alexandra Escobar o Sandra Sánchez demuestran cada día que es posible cumplir años en la élite sin perder competitividad.
La creciente especialización en el ámbito deportivo de profesionales de la medicina, la nutrición o la psicología, que ha optimizado la preparación física y mental y también el llamado ‘entrenamiento silencioso’ (alimentación, descanso), es, coinciden expertos y deportistas, el principal factor que ha permitido prolongar la vida competitiva de los atletas.
Los conocimientos científicos permiten que Rossi dispute a los 38 años un gran premio de motociclismo 24 días después de romperse la tibia y el peroné, o que algunos de los mejores jugadores de la NBA se apunten al veganismo (no consumir alimentos de origen animal) sin sufrir merma en su rendimiento.
Rossi, nacido en 1979, lleva 21 años en la cumbre. Suma nueve títulos mundiales, siete de ellos en MotoGP, y en esta última temporada ha acabado quinto y estuvo en condiciones de disputar el título.
La rotura de tibia y peroné del pasado agosto no fue la primera. Hasta en eso, ‘Il Dottore’ va a mejor: la vez anterior que se hizo la misma avería, en 2010, tardó 41 día en volver a competir.
Aunque se habla de una posible retirada cuando venza su contrato con Yamaha al término de la próxima temporada, Rossi admite que antes quiere un título mundial más, que se le resiste desde 2009.
Pero si ha habido un deporte que en 2017 ha estado en manos expertas, ese ha sido el tenis.
Durante buena parte de la temporada los cinco primeros puestos de la clasificación mundial pertenecieron a jugadores con 30 años o más: Roger Federer, 36, Novak Djokovic, 30, Andy Murray, 30, Stan Wawrinka, 32, y Rafael Nadal, 31.
El año concluye con Nadal y Federer como números uno y dos del mundo. El suizo, que enfila ya la cuarentena, ha vivido una de sus temporadas más brillantes, con victorias en el Abierto de Australia y en Wimbledon, además de en tres Masters 1.000. Y con un juego de muchos quilates.
«Cuando te haces mayor, se trata de organizar tu programa de competición de manera diferente», ha explicado Federer.
Cuarenta años tiene el argentino Manu Ginóbili, 37 el español Pau Gasol, que siguen ofreciendo espectáculo diario en la NBA con San Antonio Spurs. Dos y tres años de contrato tienen aún por delante, respectivamente. Cuatro anillos de la NBA tiene Ginóbili, dos Gasol.
Para llegar en activo a su edad, otros jugadores más jóvenes como Kyrie Irving y Wilson Chandler han abrazado la causa de la veganía. Han perdido peso y, aseguran, se sienten mejor desde que no comen productos de origen animal.
«La nutrición está también sujeta a las modas», asegura Nieves Palacios, jefa de la Unidad de Medicina, Endocrinología y Nutrición del Centro de Alto Rendimiento de Madrid. «Si quieres ser vegano, tendrás que informarte de cómo cubrir los posibles déficits de vitamina B-12 o de hierro con alimentos vegetales o con complementos. Si es así, no hay problema».
«Lo importante», dijo a Efe la especialista, «es mantener una dieta equilibrada en cantidad, calidad y regularidad. Y estar informado».
Palacios señaló que «en el alto rendimiento todo importa» y que una alimentación cuidada puede, sin duda, prolongar la vida deportiva y, junto con otros detalles, «marcar la diferencia entre ganar y perder».
«Si estamos hablando de deportistas de 40 años que están en la élite, es porque a los 20 ya se cuidaban. Eso está clarísimo. Pero cada vez se saben más cosas, hay más información, más datos, y a partir de ellos los deportistas se cuidan todavía más», dijo.
«Antes no había especialistas en medicina deportiva, ni en nutrición y dietética. Ahora hay muchos profesionales involucrados en la preparación del deportista», subrayó Nieves Palacios.
Otra española, Sandra Sánchez, es a sus 36 años la número uno indiscutible de la clasificación mundial de kárate en la modalidad de kata.
La longevidad de muchos deportistas de élite obedece, opina, a «una suma de circunstancias».
«Ha cambiado bastante la forma de entrenar. Antes se quemaba mucho la gente, se lesionaba, ahora los entrenamientos son de calidad. La vida deportiva se alarga», indicó.
«En mi caso, no he caído en el prototipo de pensar que, por tener cierta edad, debo dejarlo. He sido cabezona. El día que vea que me superan deportistas que tienen veinte años o que no puedo seguir su ritmo de entrenamientos, me lo plantearé. Pero, de momento, eso no pasa. Al contrario: cuanto más me exigen, más doy», comentó a Efe la karateca.
Sánchez subrayó la importancia de «la salud mental» en los atletas más expertos.
«La experiencia es muy importante. Yo ahora mismo compito con mucha más seguridad y entreno con más conciencia de lo que hago. Los entrenamientos dan mejor resultado y, en competición, la experiencia te da una seguridad que con 18 años te falta», insistió.
En el caso de su deporte, muchos competidores de primera fila han prolongado su vida deportiva tras conocer que el kárate debutará como deporte olímpico en los Juegos de 2020. Nadie quiere dejar pasar esa ocasión.
«Estoy segura de que es así. Conozco muchos casos de karatecas que pensaban retirarse y que, cuando se anunció que el kárate sería olímpico, decidieron intentarlo. Al menos, participar en la fase de clasificación, tomar ese camino», dijo.
También en la clasificación masculina dos ilustres veteranos, el español Damián Quintero, 33 años y número uno mundial, y el venezolano Antonio Díaz, 37 años y cuarto del ránking, son máximos aspirantes a pisar ese primer podio olímpico en 2020.
La misma intención tiene la levantadora de pesas ecuatoriana Alexandra Escobar, de 37 años, que ya ha participado en cuatro Juegos pero quiere estirar su buena forma hasta Tokio. Múltiple campeona panamericana, logró un bronce en los recientes campeonatos del mundo.
«La meta es Tokio. Voy a ir paso a paso, poco a poco a ver si llegamos. Solo competiré hasta Tokio porque ya es suficiente, ha sido toda una vida y tengo un hijo de once años al que tengo que dedicar un poco más de tiempo», manifestó Escobar tras ganar, por delante de rivales bastante más jóvenes, tres oros en los Juegos Bolivarianos de noviembre