Un Berlín decembrino al ritmo de Góspel
Martha Escalona Zerpa
Especial para Analítica.com desde Berlín
Donna Brown y su grupo los Golden Gospel Pearls ya arriban a Berlín directamente de Harlem para presentar el ya muy tradicional programa navideño de gospels en la iglesia evangélica Apostel Paulus en la bohemia urbanización Schöneberg de Berlín.
A partir del próximo primero de diciembre hasta el 28 de diciembre 2017, día de los inocentes, los amantes de ésta música podrán asistir a las funciones de tarde y de noche y vivenciar el vasto repertorio de góspels más conocidos y centrales de esta música religiosa afroamericana como “Oh happy day”, “Amazing Grace”, “Precious Lord”, “Take my hand” y “Oh Holy Night”.
Su directora, Donna Brown es una reconocida pianista y directora orquestal y cuenta con un extenso curriculum musical. Su repertorio abarca el gospel, blues y jazz, así como también la música clásica europea. Su banda está formada por seis cantantes, un baterista, un bajista y ella al piano.
El Gospel (palabra original: GodSpell o llamada de Dios) es el resultado de un sincretismo musical único. A esta forma de cantar se le denominó así ya que era un canto piadoso para invitar a las personas a cantar y a orar ante Dios y dar votos de fe a la liturgía católica.
El Gospel se nutre de dos influencias musicales contrapuestas, por un lado las canciones de la iglesia protestante anglosajona y por el otro lado elementos musicales y religiosos traídos por los africanos, quienes eran sometidos a la esclavitud en el norte de América. Su surgimiento se especifica históricamente en las iglesias afroamericanas del siglo XVIII. Sin embargo, el Gospel se hizo particularmente popular durante la década de los 30 del siglo pasado en el distrito Harlem de Nueva York.
Los conciertos de Gospels se han convertido con el pasar del tiempo en una inquebrantable tradición en la hermosa iglesia neogótica Apostel-Paulus.
Las entradas se agotan para todas las funciones y las colas antes de cada concierto, frente al portal de la iglesia, se hacen largas y solo tolerables en el frío invernal tomando vino caliente y comiendo brezel con mantequilla.
Con sus voces y performance los Golden Gospel Pearls nos dejan sentir la alegría completa del advenimiento del niño dios y de la navidad, sumergiéndonos en una ola de júbilo y regocijo y reconfortándonos por completo de la dura y fría butaca de la imponente iglesia de ladrillos rojos.