EE.UU. no planea acciones militares contra Venezuela en el «futuro cercano»
El Gobierno de Estados Unidos no planea acciones militares contra Venezuela en «el futuro cercano», según afirmó este viernes el principal asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, el teniente general H.R. McMaster.
«No se anticipan acciones militares en el futuro cercano», dijo McMaster en una rueda de prensa en la Casa Blanca.
McMaster respondió a preguntas de la prensa sobre unas declaraciones del presidente de EE.UU., Donald Trump, quien el pasado 11 de agosto señaló que no descartaba una «opción militar» en relación con la crisis que atraviesa Venezuela.
El teniente general explicó que Trump ha pedido a su equipo de seguridad nacional que «anticipe la posibilidad de un mayor deterioro en Venezuela» y que, por ello, la Casa Blanca está valorando, en conjunto, la respuesta militar y diplomática a la crisis en Venezuela.
«En realidad, no existe tal cosa como una opción militar o una opción diplomática en solitario, tratamos de integrar todos esos elementos juntos», precisó McMaster.
Junto a McMaster, se situó el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, uno de los promotores de las sanciones que impuso hoy EE.UU. a Venezuela y que prohíben al sistema financiero estadounidense la compra de bonos públicos y deuda del Gobierno de Venezuela y de su petrolera estatal, Pdvsa.
En declaraciones a la prensa, Mnuchin urgió a los miembros del Gobierno venezolano a «distanciarse de la violencia y de la dictadura» y consideró que las nuevas sanciones, las primeras contra el sistema financiero de Venezuela, «son el paso siguiente hacia la libertad del pueblo venezolano».
Preguntado por las consecuencias políticas de las sanciones, Mnuchin dijo que EE.UU. no pretende cambiar el liderazgo de Venezuela «per se», sino que intenta «restaurar el proceso democrático y el Estado de Derecho».
El Gobierno de Estados Unidos ha repetido que las sanciones seguirán hasta que Venezuela vea «restaurada» su democracia, pero hasta ahora no se ha decidido a prohibir la importación de petróleo, el sector clave de la economía venezolana.