Alivio en Guri ¿Final de la crisis del sector eléctrico?
El aliviadero como espectáculo
El miércoles abrió sus compuertas por primera vez desde el año 2000 el aliviadero de Guri, brindando una ocasión para contemplar este hermoso espectáculo que los guayaneses y todos los venezolanos deberían aprovechar. Hay que tomar en cuenta que los niños de menos de 10 años o no lo han visto o no se acuerdan, pero también que el imponente panorama es digno de verse otra vez por los mayores que alguna vez lo conocieron. Edelca mantiene programas de atención a visitantes en los que recibe con su tradicional hospitalidad a los que quieran conocer el proyecto y les transmite interesante información sobre el mismo.
Hay que considerar que el show que ofrece esa gran energía deslizándose compuertas abajo no durará mucho tiempo, por lo que hay que apurase en la visita. Las probabilidades dicen que en octubre la represa retornará al silencio que ha mantenido estos cinco años y quién sabe después de entonces cuando las compuertas volverán a abrirse otra vez, pero no es de extrañar que se mantengan cerradas por un lapso incluso más largo.
Además, no hay ninguna garantía de que el chorro se mantenga abierto continuamente por los próximos dos meses. Si aparece por allí una semana de bajos aportes en el Caroní, las compuertas se volverán a cerrar a la espera de que aumente el caudal del río. Por esta razón es recomendable que usted aproveche las vacaciones de los muchachos y se de una vuelta por Guri para disfrutar de este paisaje.
En los últimos cinco años las compuertas han estado cerradas, pero no es sólo esto, el embalse de Guri bajó peligrosamente hasta experimentar los mínimos niveles de su historia en el año 2003, para luego recuperarse en 2004 y llenarse en este año 2005 ¿Esto significa que ya se acabó la crisis? ¿Qué determinó las fuertes bajas del nivel y su recuperación actual? Es conveniente detenerse a analizar lo que sucedió en el período para afrontar el futuro con prudencia y evitar los sustos.
¿Cuál período seco?
Se ha dicho que los bajos niveles del embalse de Guri se debieron a la fuerte sequía de los últimos años, pero no hay nada más falso que esto. El único año seco, de los últimos seis, fue 2001, el resto de los años han sido normales, inclusive 2002 y 2004 brindaron aportes superiores al promedio y lo que va de 2005, hasta agosto, va por el mismo camino, mientras que el aporte hídrico de 2003 fue apenas 4% inferior a la media, lo que se considera un aporte normal y nunca seco.
Lo que pasó fue que las necesidades del país y la incapacidad del parque térmico, especialmente de Cadafe, para responder a lo previsto han obligado a Edelca a generar más energía de la recomendable ¿Pero qué es lo recomendable? Los proyectos hidroeléctricos producen más o menos energía cada año, de acuerdo con los aportes hídricos y la capacidad de almacenamiento, esto hace que Edelca tenga que limitar sus compromisos a una cantidad llamada firme, que puede ser garantizada aun en los años secos. Los años en que el aporte sea superior las centrales del Caroní pueden ofrecer más energía al país, pero nunca comprometerse, ya que incumplirían si baja la hidrología. Entonces lo recomendable resulta ser lo que permitan las lluvias y el agua almacenada. Después de la sequía del 2001, lo recomendable era reducir la producción en el Caroní para recuperar el embalse, pero esto no pudo hacerse.
Dada la situación del parque generador del país, que hacía imposible el cumplimiento de sus compromisos por parte del parque térmico, se presentó la disyuntiva de aumentar la producción del Caroní, por encima de lo que indicaban tanto el agua almacenada como los aportes, o racionar. Pero racionar es una opción muy difícil de tomar, hay que decidir a quién, cuándo y en qué magnitud aplicar el racionamiento. Esto siempre es antipático e impopular.
Ante esta disyuntiva, la solución que se tomó, en los años 2002 y 2003, fue exprimir al Caroní cuando lo recomendable era que Edelca se limitara a cumplir sus compromisos. La generación adicional condujo a que el embalse bajara a los peligrosos niveles que observamos en 2003. Por fortuna los aportes hídricos de los años 2002 al 2005 ayudaron a capear la situación. Esto, sumado a la entrada de Caruachi, evitó el colapso.
¿Por qué se llena el embalse en 2005?
En el caso de este año hay dos factores que se han conjugado para que podamos contemplar esta maravilla, por un lado la entrada en operación de Caruachi, cuya primera unidad entró en servicio en abril de 2003 y ya tiene nueve de sus doce unidades en servicio, lo que le permite entregar toda su energía firme. Este proyecto le dio un respiro a Guri y Macagua, ayudando a que se pudiera satisfacer la demanda soltando menos agua en Guri y permitiendo así la recuperación del embalse. El segundo factor viene dado por las restricciones de transmisión de energía hacia fuera de Guayana, especialmente en las horas pico, que han limitado la generación en las centrales del Caroní, ayudando así a que el embalse se llenara.
Por diversas condiciones técnicas, la capacidad de transmisión, especialmente hacia el occidente del país, está limitada, lo que obliga a mantener generación térmica funcionando en Zulia, Morón, Barquisimeto y Caracas aun cuando en las centrales del Caroní haya suficiente agua y máquinas para reducir dicha generación. Estas limitaciones están obligando a quemar combustibles líquidos, que podrían exportarse y producir divisas, ante la imposibilidad de llevar energía del Caroní.
Pero estos factores que han permitido llenar el embalse de Guri probablemente no serán suficientes en el futuro. La demanda seguirá creciendo y el parque térmico tiene poco más que aportar, y a esto se suma la carencia de gas natural que llena de incertidumbre las escasas iniciativas de expansión del parque generador que se están emprendiendo. Por todo ello debe esperarse que las centrales del Caroní sean más exigidas en el futuro, aunque sea mayormente en las horas valle, por lo que la probabilidad de alivio disminuirá en los próximos años haciendo más improbable la posibilidad de contemplar el panorama que se nos ofrece hoy.
La crisis continúa
Sin embargo, los mismos elementos que condujeron a la crisis del embalse en 2002 y 2003 están presentes hoy, siendo mucho más probable que se repitan en el futuro cercano los niveles alarmantes que vivimos, a que se tengan que abrir los aliviaderos. ¿Por qué? A estas alturas, en agosto 2005, la generación de Edelca va rumbo a alcanzar 75.000 GWh en el año, alrededor de 10.000 Gwh por encima de la energía que se puede garantizar en condiciones de año seco por las centrales de Guri más Caruachi más Macagua, que es alrededor de 65.000 Gwh. Con un año promedio como el actual, detrás de otro año promedio como 2004, no hay ningún problema, ¿Pero qué pasará si llegan años con aportes inferiores al promedio? Empezarán los problemas. En 2006 no habrá dificultades para que el Caroní cumpla con lo que solicite el país para contribuir a satisfacer las necesidades, a pesar de que serán mayores que las de 2005, pero de 2007 en adelante la situación es incierta. En cualquier caso, aun en 2006, es poco probable que se abra el aliviadero.
En estas circunstancias es legítimo hablar de una crisis latente, ya que sus principales causas no se han solventado. Estas son: Incapacidad del parque térmico para cumplir sus compromisos y lentitud en la ejecución de los proyectos de ampliación del parque generador. Todo ello dentro de un marco legal inoperante que frena la contribución del sector privado.
Por todo ello es bueno repetir la invitación. Vayan a ver las compuertas abiertas en el aliviadero de Guri, ya que puede convertirse en un evento realmente excepcional.