Venezuela llama a países árabes al diálogo ante acusaciones contra Catar
Venezuela hizo un llamado al diálogo entre los países árabes que han roto relaciones con Catar, luego de que su Gobierno, dirigido por el emir Tamim ben Hamad al Zani, fuera acusado de financiar a organizaciones consideradas terroristas, como el Estado Islámico, Al Qaeda y los Hermanos Musulmanes.
«Venezuela expresa su profunda preocupación ante las diferencias que han surgido entre algunos Gobiernos hermanos de países árabes en el Golfo, alimentadas por tendenciosas e interesadas versiones mediáticas que procuran la confrontación entre pueblos unidos por vínculos comunes», dice un comunicado de la Cancillería del país caribeño.
El Gobierno subraya que Venezuela es un «país hermano del pueblo árabe y socio histórico de los Estados del Golfo» y comparte espacios multilaterales de índole político y económico con las naciones «concernidas en la actual coyuntura».
«El Gobierno Bolivariano hace un llamado al entendimiento, y a superar las diferencias actuales mediante el diálogo diplomático franco y constructivo, al tiempo que desestima las acciones que puedan exacerbar el conflicto en curso», prosigue la nota oficial.
Además, la Administración de Nicolás Maduro «hace votos sinceros por el total restablecimiento de los fraternales lazos» y «ofrece sus buenos oficios para ayudar a superar esta situación que perturba el normal relacionamiento en una región tan importante para la vida económica, política y cultural de la comunidad internacional».
Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Baréin anunciaron este lunes la ruptura de relaciones diplomáticas con Catar y ordenaron el cierre de las fronteras terrestres y del espacio aéreo y marítimo a los medios de transporte de ese país.
Además de esos cuatro países, también han roto las relaciones con Catar, Maldivas y los Ejecutivos que apoya Arabia Saudí en los conflictos del Yemen y Libia.
Catar ha rechazado las acusaciones al considerarlas «calumnias injustificadas», y ha asegurado que «lucha contra el terrorismo y el extremismo», mientras la comunidad internacional busca modos de poner fin a esta crisis diplomática.