Opinión Nacional

Agua para el planeta tierra

El tema de la escasez de agua en el planeta tierra y la posibilidad de su agotamiento se repite en forma tan reiterada que merece una reflexión. La razón estriba en que el tema se trata como si el agua fuera un recurso no renovable, como el petróleo u otros yacimientos naturales que se acumularon en el subsuelo a través de milenios y ahora los estamos explotando hasta llegar, más tarde o más temprano, a su agotamiento.

Pero ocurre que nuestro balón azul tiene ese color tanto por la atmósfera como por su abundancia de agua. Hasta el punto en que, si fuéramos rigurosos, deberíamos llamar agua a la humilde nave en que nos toca transitar por la galaxia y no tierra como acostumbramos. De hecho, es mucho más probable que se acabe la vida humana por otras causas que por la falta de agua.

El agua cubre el 70% del planeta y su volumen alcanza 1.300 millones de Km3. Se pueden sacar muchas cuentas y comparaciones que demuestran que tenemos agua para rato, como se dice coloquialmente. Pero eso no significa que no tengamos ningún problema con la dotación de agua y que nos podamos desentender del tema, por supuesto que no. Más del 97% del agua del planeta está en los mares y eso significa que es salada ¿Qué mecanismos tenemos para potabilizarla? El primero y principal, de lejos, es la energía solar. El sol, al irradiar su energía sobre la tierra, evapora el agua de los océanos y se la lleva a las nubes totalmente libre de salitre y de cualquier otra impureza. Actúa como una gigantesca máquina destiladora que convierte agua salada en potable constantemente. Para poner el asunto en perspectiva, el sol evapora más agua que la que corre por todos los ríos del planeta juntos y realiza el trabajo de hormiguita de subirla a las nubes y dejarla caer a diario, manteniendo el balance natural. Sin embargo, como nada es perfecto, no la reparte igual en todas partes. Así tenemos áreas de abundancia, en donde sobra el agua, junto con áreas de escasez, en donde falta. Por otra parte, en cada rincón del planeta las lluvias varían estacionalmente, por ello se requieren instalaciones que la almacenen en la abundancia y la administren en la escasez.

Pero se comete un gran error al decir “con las aguas que usan los ricos para regar sus jardines (o sus campos de golf) se podrían abastecer tantos miles de personas”. Porque resulta que si los canadienses dejan de utilizar su abundante agua en regadíos que parecen intrascendentes no van a hacer nada por aliviar las sequías de Somalia. Los canadienses utilizan el agua que su ciclo hidrológico les brinda, la cual es totalmente renovable y el sol se las seguirá brindando por milenios si no cometen desafueros, entre los cuales no está regar sus jardines.

Por otro lado, vemos países “secos” que gerencian muy bien el agua que les ofrece el cielo, junto con países “húmedos” que padecen sequía. Pongamos ejemplos. España es un país muy seco, sobre todo en su región sureste, mientras posee una dotación razonable en el noroeste, en algunas zonas inclusive tiene abundancia, y se las arregla para manejar su dotación de agua de una manera razonable, mediante embalses y trasvases, que le permiten sobrevivir utilizando adecuadamente lo que le da la naturaleza. En el otro lado podemos ver a Etiopía, país en donde nace el Nilo Azul. Al menos dos tercios de Etiopía están formados por mesetas en donde el agua es más que abundante. Pero el este del país es azotado por sequías recurrentes. Etiopía no tiene una economía que le permita administrar el agua y la deforestación agrava el problema día tras día.

En definitiva, y para no salirnos de los apretados límites a los que nos condiciona este artículo, la escasez o abundancia de agua en cada país están determinadas por la economía y la tecnología. Pero el agua no se acabará tan fácilmente como muchos oráculos predicen. Y, lamentablemente, si no superamos la pobreza, seguiremos viviendo con gente que se baña en jacuzzis mientras otros se mueren de sed.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba