Hicieron trampa, pero vamos a ganar
¡Nos hicieron trampa! Gritan muchos. ¡Sí! Y soy de las que pocas que lo decían cuando muchos de los «odiadores» mandaban a callar, porque hacíamos un flaco servicio dudando del CNE. ¡Nos hicieron trampa! Sí. Pero eso no significa que no vamos a ganar. ¡Nos hicieron trampa! Sí. Pero la cosa terminó cerrada y antes de que muchos peguen el grito en el cielo, permítanme explicarlo.
A quienes hoy pretenden la desunión y quemar a Capriles, les voy a explicar que en 128 centros electorales el gobierno se llevó el 99,44% de los votos. ¡Eso es matemática y estadísticamente imposible! ¡Gritarán algunos! Aquí hubo fraude y del bueno. Y así podemos seguir explicando que se sabe que en 25 mesas de votación con más de 500 electores, el gobierno sacó el 100% de los votos ¿Ni uno para la oposición? En otras 23 mesas del mismo municipio la oposición solo sacó un voto en cada mesa. En otras 53, de unos 450 electores promedio, apenas sacó 2 votos. ¡Nos hicieron trampas! Gritarán muchos. Y eso no pasó solo en un estado, porque al menos hay otros dos en los que también hay mesas en las que el presidente se llevó el 99% de los votos.
Las largas colas en los lugares de la oposición para desestimular el voto y las carpas del gobierno para amedrentar a trabajadores o a opositores y centros de votaciones con 108% de votos fueron algo común. Sobran los videos en Youtube donde vemos a personas asistiendo a votar a otras, hay claras evidencias de máquinas de votar que por más que usted apretara el botón por su candidato, salía otro y bueno, que más pruebas si algunos simpatizantes del gobierno públicamente, admitieron que votaron más de una vez por el gobierno.
El problema amigo lector antes de saltar a las calles, es que esta historia no ocurrió en Venezuela sino en las presidenciales de Estados Unidos en las que ganó Obama. Buena parte de estas denuncias, manejadas por la oposición ocurrieron en los estados Ohio, Filadelfia y Florida. Así que nosotros podemos ir con nuestra carpeta de fraude bajo el brazo, que nadie en Estados Unidos nos podrá ayudar. ¿Nos hicieron trampa? Sí, pero no significa que vamos a perder.
¿Podemos ir a México a explicarle al PAN de Enrique Calderón o al PRI de Peña Nieto que existió una campaña abusiva de medios contra la oposición, si eso es lo mismo que les critica su propia oposición? Compra de votos y presión a los votantes, es parte de la campaña opositora mexicana, que sí hizo lo que muchos desean, sacaron a cientos de miles a las calles a protestar y no pocas fueron violentas (BBC 8/07/12) pero esto no logró más que a un López Obrador, con muchas más pruebas que Capriles, terminara dos veces en la misma plaza (2012). ¡Nos hicieron trampa! Pero el PRI, algo que nadie pensaba que podía suceder, le ganó al PRD y al PAN.
No falta quien llame a la calle, buena parte de ellos tras sus cómodos y anónimos sobrenombres de Twitter y no pocos desde el exterior. ¡Salgan a la calle! Es el grito de algunos que nunca serán ellos. ¡Que salgan a la calle!.. los demás. ¡Que me quiten a los chavistas!.. los demás. Esa especie de «pájaro preñadísimo» que piensa absurdamente, que Capriles, Leopoldo o María Corina tienen algún primo en la 4ta. División de Infantería o muchos amigos en la promoción «Tomás Montilla» de Diosdado Cabello, Vielma Mora o Jesse Chacón. El mismo «pájaro preñadisimo» que piensa que ahora sí lo del papel «tualé» va a sacar a los chavistas.
Lo que tenemos que hacer, amigos, es preparar la próxima batalla electoral y ganarla. Ni los videos, ni las quejas sirven de algo, si el que lo filmó no colocó un reparo en el acta en la parte que dice observaciones debajo del cierre del acto de votación, que es lo que debió hacer o en su defecto, si por miedo, ninguno de los testigos de los partidos llamó a la autoridad militar competente o si no se atrevió, con un mensaje de texto a sus supervisores habría detenido la arbitrariedad. Nadie puede presentar eso como prueba, si no consta en acta, porque no se sabe si ocurrió durante la instalación o el simulacro. Acta mata elección, pero acta con reparo, mata trampa, amigo lector.
El gobierno quedó patuleco con el palizón de abril. Ese sí fue un duro «golpe» pero electoral directo a las bases del chavismo. El próximo puede ser mortal y como ya lo he dicho hasta el cansancio, en las alcaldías, es donde se encuentran las bases del chavismo. Arrebatar cientos de alcaldías, es quitarle sus bases electorales y 600 mil familias que pueden representar 1,5 millones de votantes.
No dejemos engañarnos por el «pájaro preñadisimo» que piensa que hay batallas que no importan. «La única que importa es la presidencial» es el error más grande que podemos cometer. La batalla de Carabobo, como tantas en el mundo nunca se habría podido ganar, si no hubiéramos debilitado a los españoles en las batallas anteriores.
Si dejamos de pelear y nos concentramos en la próxima batalla electoral, vamos a ganar. No caigan en el juego divisionista.
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