Jhonattan, el “bogeyman”
Cuando califico a Jhonattan Vegas de “bogeyman” no me estoy refiriendo a que sea el personaje imaginario que asusta a los niños en los Estados Unidos con el que los padres los amenazan para que se porten bien. Ciertamente, Jhonattan no es un “bogeyman”, no es un “coco” que asuste a los niños sino, todo lo contrario, un modelo que positivamente se les ofrece a esos niños y que por lo demás es sumamente agradable, culto, y de buen trato, es alguien que muchos esperan imitar.
Pero Jhonattan si es otro “bogeyman”, si calificamos como tal al jugador de golf que comete excesivos “bogies” y “doble-bogies”, es decir golpes en un hoyo por encima del par, como 4 en un par tres, 5 en un par 4 y hasta 7 en un par 5. Cunado vemos sus resultados en un torneo de la PGA, es frecuente que haya logrado 5 o 6 birdies y hasta un eagle que desaparecen con demasiados bogies y doble bogies. En el primer torneo de la PGA que ganó vimos como desaparecía una amplia ventaja sobre sus rivales por los bogies cometidos y sólo ganó difícilmente en el desempate.
Es difícil explicar qué le sucede a Jhonattan Vegas porque en la TV no sacan todos lo hoyos jugados por él, cosa que sí hacen con otros jugadores que incluso van peor que él. Uno podría pensar que Jhonattan, con una de las pegadas más fuertes desde el “tee” —casi siempre supera las 300 yardas— parece olvidar lo que dicen los golfistas americanos: “drive for show and putt por dough”, en español “pegar el drive para lucirse pero usar el putter para ganar dinero”.
Habría que darle algunos consejos a este excelente golfista venezolano: buscar la manera de que le filmen todos los hoyos jugados –cosa que no hacen los canales comerciales” para que pueda analizar los errores cometidos; buscar los pares cuando lograr un birdie sea muy riesgoso; aprender a conocer todos los greens, la velocidad con la que en ellos rueda la pelota según la determina el “stimp meter”; pensar en contar con un caddy que conozca casi todas las canchas de los torneos de la PGA; contratar, como muchos de los grandes jugadores, los servicios de un psicólogo deportivo.