Cinco momentos memorables de La La Land
En la historia de los Premios Óscar, solo tres películas han logrado la hazaña de ser nominadas en catorce categorías. “All About Eve” (1950) y “Titanic” (1997) son dos de ellas. La tercera es una trama musical que ha dado bastante de qué hablar este año: “La La Land”, escrita y dirigida por Damien Chazelle.
Quizá uno de los elementos que hace especial a este largometraje es que se incluyeron experiencias de sus protagonistas –Emma Stone y Ryan Gosling– en la historia. Chazelle se reunió con cada uno en privado y pidió que le contaran los fracasos que vivieron antes de ser famosos. De esta manera nacieron Mia y Sebastian, una aspirante a actriz y un intérprete de jazz que luchan entre la idea de amarse y cumplir sus sueños.
Lo curioso de la obra es que a simple vista no es más que una comedia romántica. ¿Acaso no hay incontables tramas así? Pero es que el secreto de una buena película no está en qué se cuenta, sino cómo se cuenta. En «La La Land» se evidencia una calidad técnica, argumental y poética excelsa. Varios de los números musicales se rodaron «de pies a cabeza», utilizando diversos estilos y se úso la pantalla ancha CinemaScope.
A continuación enumeramos cinco de los momentos más memorables de este largometraje. Además, contamos algunas curiosidades sobre esas escenas:
1.- La autopista
La película comienza con un plano secuencia de cuatro minutos y medio en el que, en medio del tráfico, las personas salen de sus carros y bailan al son de “Another Day Of Sun”. La escena fue filmada en una de las vías de Los Ángeles, en el tramo que conecta la autopista 105 con la 110, que conduce hacia el centro de la ciudad. Trabajaron durante dos días para capturar el momento y requirió más de 100 bailarines.
El equipo tuvo bastantes problemas con la iluminación y las grúas, ya que mientras se movían por el escenario había momentos en los que se veía la sombra del mecanismo en el plano. Como tampoco se quería utilizar posproducción digital, decidieron solucionarlo cortando la coreografía en dos puntos. Además, hicieron una combinación de grúa y stready cam. Al final, la escena quedó en tres fragmentos.
2.- El mirador
Otro plano secuencia. En este caso se trata de Sebastian y Mia bailando en la cima de una colina de Hollywood Hills, con Los Ángeles de fondo, justo en la llamada «hora mágica», ese ocaso malva y naranja que es apreciado por tantos cineastas. Dado que Stone y Gosling nunca habían hecho un musical de Broadway, fue difícil capturar la escena. En una de las tomas, la actriz tropezó con la parte posterior del banco, pero sin importarle el incidente, continuó derecho hacia arriba y siguió adelante.
3.- El restaurante
En un local, Sebastian está sumamente inspirado mientras improvisa una pieza de jazz. En ese momento, Mia entra, el tiempo se detiene, las luces de la escena se apagan y solo se enfocan en los protagonistas. La canción termina convirtiéndose en el tema de los dos.
4.- El planetario
La escena, que se filmó en el Griffith Observatory, es una de las más emblemáticas de la película. En ella los protagonistas bailan entre las estrellas. Esta parte del musical es la muestra más pura de la idealización que Chazelle tiene de Los Ángeles, «La ciudad de las estrellas».
5.- Epílogo
Este es, posiblemente, el momento más emotivo de la película. Mia se reencuentra con Sebastian después de varios años. Él comienza a tocar la canción de ambos y ella rememora la historia de amor que vivieron, pero desde otra perspectiva: una última audición, seguida de un remolino de música y ballet resonantes y melancólicos, que vienen a ser la guinda del pastel que se ha elaborado durante toda la película.
Sin duda, «La La Land» tiene muchos más momentos que vale la pena mencionar, pero terminaríamos con un texto mucho más extenso que este. Si usted ya vio la cinta, cuéntenos, ¿cuál fue su momento favorito de esta obra?
https://www.youtube.com/watch?v=Ekrr94BohBQ