Gales defiende su derecho a ser consultado sobre el inicio del «brexit»
El abogado general del Gobierno de Gales, Richard Gordon, defendió hoy ante el Tribunal Supremo británico el derecho constitucional de la Asamblea autónoma galesa a ser consultada sobre el inicio del proceso del «brexit».
Gordon presentó sus argumentos en el último día de análisis del recurso del Gobierno de la primera ministra, Theresa May, contra un dictamen de noviembre que le obliga a obtener permiso del Parlamento de Londres antes de activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa, lo que iniciaría los dos años de negociaciones con Bruselas para salir de la Unión Europea (UE).
El abogado galés aseguró que «un niño de 6 años» podría ver los fallos en la posición del Ejecutivo central, que reclama que puede hacer uso de una antigua prerrogativa real para activar de forma unilateral las negociaciones del «brexit».
Gordon argumentó que, no solo el Gobierno de May debe obtener legislación específica del Parlamento de Westminster -formado por los Comunes y los Lores-, también necesita el «consentimiento» de los legislativos autonómicos, en su caso la Asamblea galesa, dado que la salida de la UE afectará a la legislación regional.
«La prerrogativa real puede tener efectos en la legislación, pero no puede prescindir de ella», arguyó el letrado, que insistió en que es importante mantener el principio constitucional de consulta a los Parlamentos autonómicos, aunque no tengan poder de veto.
Posteriormente, intervino ante el Supremo la abogada Helen Mountfield, que representa a un grupo de ciudadanos del Reino Unido y residentes en países europeos y en Gibraltar, quien alegó asimismo que «no hay prerrogativa real que permita ignorar o cambiar la ley».
El Tribunal Supremo concluye hoy sus audiencias con las partes interesadas y se retirará para deliberar su veredicto sobre el recurso, que se espera que anuncie a mediados de enero.