Opinión Nacional

Maduro pacifica su oposición y no al PSUV

No hay mayores cambios en la situación que denunciamos hace una década, cuando fuimos tomados por el proyecto Venecuba. Desde entonces somos venecubanos, exvenezolanos y a partir del Plan-Ley de la Patria se adecua el cuadro político pos-Chávez para profundizar esa hegemonía militarista-socialista del siglo XXI.

Se plantea así el avance del proyecto Comunalista para afianzar la dictadura venecubana que sigue aprovechando la mampara democraticista que le proporciona el paredón electoral que financia Pdvsa y administra el CNE.

Pero ahora se busca corregir las atrocidades cometidas en las diferentes «construcciones del socialismo», que se convierten en punto de partida de fracasos, como el cubano. Por esto el proyecto Comunas tiene como meta implantar un comunalismo por la vía legal-constitucional.

Este es el acuerdo que, al menos en la práctica, se monta a partir del gobierno de pacificación y colaboración que se instala el 18D-13 en Miraflores con el encuentro del alto gobierno con alcaldes y gobernadores.

Estamos entonces ante un plan de dominación en el cual participan el Gobierno y sus oposiciones. Se utiliza la vía de la concordia y la paz como la más expedita para alcanzar el comunalismo. Pero ¿cómo se llegó a este punto? A ese debate están destinados los puntos que siguen.

1.- Cuando las oposiciones acuden a Miraflores no ponen condición. Cada uno de los alcaldes y gobernadores hizo sus exigencias. La respuesta inmediata fue solicitar proyectos para sus localidades que serían de inmediato aprobados, dado que estaba previsto el respectivo presupuesto.

2.- Se inicia así una política de acercamiento entre Alto y Bajo gobiernos en el marco de una supuesta e implícita rectificación que conduce a una pacificación que el régimen considera una necesidad impostergable para lograr la solución de los grandes problemas nacionales. El pedido de NM es enfático: ¡Pacificamos o pacificamos a Venezuela!

3.- ¿Pero qué significa este llamado de pacificación? ¿Algo improvisado o responde a otro plan venecubano?

4.- Al haber un plan de condiciones y peticiones, el Gobierno se permitió improvisar en la reunión como le dio la gana. Puso a su oposición a cantar el exhimno nacional conducido por el Comandante Eterno y luego le dio el tratamiento al detal que la misma alentó y permitió.

5.- Para entender este plan de pacificación hay que advertir que desde hace una década rige aquí un plan de dominación venecubano que la oposición oficial no ha querido entender y menos asumir, porque la obligaría a hacer una verdadera política de oposición y no de negociación electoralista o de reparto-pacificación como las que ahora desarrolla con el Alto Gobierno de NM.

6.- La política de supuesta paz lanzada por este gobierno tiene como estrategia despejar el camino opositor para avanzar con mayor facilidad en la aplicación del Plan-ley de la Patria cuyo fondo es la implantación del comunalismo. Algo indispensable para hacer frente a la implosión planteada hoy en el PSUV.

7.- En efecto, el principal enemigo del régimen no es la oposición oficial. Esta se presenta dócilmente a Miraflores y de inmediato se le monta en acuerdos-negociaciones para establecer una paz que permita aumentar la gobernabilidad. Algo que NM no puede conseguir muy fácil en su partido. Los radicales siguen en la línea del Comandante Eterno e Infinito y no aceptan pactos con una derecha que no puede volver.

8.- El Alto Comando de Venecuba, encabezado por los hermanos Castro, tiene claro que había que introducir cambios en la política de dominación, aplicada sobre este expaís, a partir de la ausencia de Chávez. Maduro no calza los requisitos de su padre, el caudillo. Carece de su «magia-embrujo» y de la ascendencia sobre militancia y colectivo en general.

9.- Y por ello, ve delicada la situación de la política interna del PSUV. La lucha por el dominio de posiciones es galopante. Los grupos son en muchos casos irreconciliables. Todos dicen estar con la «revolución». Pero en cada caso incorporan las reservas que llegan hasta el nivel de los más duros enfrentamientos ideológico-políticos. Las acusaciones de Toby Valderrama sobre la falsificación del Plan de la Patria de Chávez para hacer concesiones a la derecha son un claro ejemplo de esta situación.

10.- Y a la vez esa dirigencia no pierde de vista los resultados del 8D. A pesar del multimillonario y grosero bombardeo publicitario de lado y lado, la maquinaria de compra-venta de votos y conciencia y la persecución en las redes de todo lo que oliese a «no votaré», hubo una abstención superior al 40%. Un universo que puede llegar al 50% de los votantes no cuadrado con el régimen ni con su oposición.

11.- Para NM y el régimen en general ese 50% forma parte de una Tercera Posición que hasta el presente no se ha organizado pero que, de hacerlo, podría capitalizar el descontento de una mayoría cansada de la continuad política de los acuerdos y negociaciones que concluyen en los peores fracasos. De allí que, curiosamente, NM en cadena nacional del 06/01/14 dijese que utilizará el Movimiento de Movimientos (MdM) propuesto por la Cátedra «Pío Tamayo» de la UCV como entidad organizativa. ¿Y qué pasó con su partido? ¿No cree ya en su capacidad organizativa?

12.- Y a esta hora ¿dónde estamos parados? Vamos vía al comunalismo. La «Pacificación Maduro» solo cumple con los lineamientos dispuestos en el alto mando de Venecuba para absorber y organizar su oposición a la vez que despejar el camino de lo que significa la lucha interna en el seno del PSUV entre derecha, radicales y centristas.

13.- Y mientras avanza el Plan NM de la Patria conjuntamente con su oposición oficial, la Tercera Posición está obligada a crear sus mecanismos de formación y organización. De simple observador debe pasar a ser actor de su historia. No seguir cumpliendo con la voluntad de los electoralistas para seguir legitimando los fraudes-trampas permanentes del CNE. Es hora de cumplir con la responsabilidad que impone la historia del pueblo-colectivo.

14.- Entendemos el Movimiento de Movimientos (MdM) como una estructura organizativa en la cual cada uno de los actores, que esté dispuesto a construir una historia diferente, debe ponerse al frente de un grupo, sin liderazgo tradicional o vertical sino horizontal, para comenzar a debatir sobre la situación nacional y determinar las acciones que se puedan adelantar en el marco democrático de una red de redes con la que se pueda avanzar en acciones contra el hundimiento de esta pisoteada Venezuela.

15.- Esta Red del Movimiento de Movimientos (MdM) debe considerar las diferentes propuestas de Constituyente. La nuestra se centra en la aspiración de que el colectivo-pueblo no vuelva a caer en las garras del tramposo y ladrón CNE. Proponemos la Constituyente originaria, de calle y sin CNE. Poner en acción la fuerza social que determine una nueva realidad nacional, un nuevo cuadro institucional, decidido por la mayoría-colectivo-pueblo.

De no ser así estaríamos en vías de otra trampa más. Este tema lo discutiremos en la Cátedra «Pío Tamayo» de la UCV, este lunes 20, a las 6pm. Sala E. ¿Avanzaremos o seguiremos en las garras de los monstruos de nuestra vigente politiquería? ¡Qué historia amigos!

@ablancomunoz

 

 

 

 

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