Del augusto Obama al alarico Trump

Escribí dos breves sobre ensayos sobre la elección de Obama, calificada en su momento como un triunfo de la cultura y me atrevo a afirmar que la elección  de Trump es el éxito de la anticultura. Sustentaba, para el primer caso,   que su elección superaba el racismo, el protestantismo exclusionista, y  que el pensamiento abierto y  el “espíritu” democrático derrotaba las tradicionales formas políticas que, justo es decir, se habían abierto con Kennedy, el primer católico que llega a la presidencia,  y mejor sustentados  por Clinton. He reafirmado que, además, su triunfo significaba una redimensión del desarrollo científico y tecnológico del país, con mayor énfasis que otras expresiones de la economía, del mismo modo que cambiaría un tanto la política internacional de los Estados Unidos.

Triunfo de la cultura, “Así, pues, el presidente Obama es estadounidense negro. Que triunfa porque es un estadounidense que corona un proceso cultural muy complejo, rico en contradicciones y aportes y, desde luego, por sus condiciones humanas, por su liderazgo que, destáquese, tuvo un claro soporte en el ex presidente, Clinton, el de los senderos dionisíacos y las reflexiones apolíneas sobre la educación y, de modo especial, de la universidad. Obama gobernará como un estadounidense y hará de los intereses fundamentales de los Estados Unidos el centro mismo de sus intereses, que son suyos, los intereses de su gobierno. Reitero, su personalidad jugará un gran papel. Su decisiva lucha por la civilidad no por la negritud será de importancia para el mundo, porque lo es, esencialmente, para los propios Estados Unidos. Una experiencia única que corona un largo trayecto y que ojalá, por el bien de la humanidad, trascienda”. (Analítica 2008).

“Uno de los yerros del genio de Marx fue no haberse aplicado su fórmula epistemológica a la historia, “si la apariencia, sentenció,  se confundiera con la esencia, la ciencia no tendría razón de ser”, su verdad, empero, no la aplicó cuando creyó que el movimiento de la historia estaba predominantemente determinado por la lucha de clase y no descubrió que su motor es el dominio de la energía. Digamos hoy que el poder siempre tuvo como centro de su preocupación el dominio de la energía.  No es la maldad del esclavista responsable de la esclavitud;  sencillamente el esclavo era la fuente de la energía que movía la maquinaria del poder esclavista. Gracias a la ciencia y sus objetivaciones en la técnica, se pudo superar tal tragedia; pero, el poder seguirá hasta el fin de los tiempos tras la energía. El carbón sustituido por el petróleo, éste por otras fuentes más eficaces y mayor eficiencia y de menos riesgos, y, así seguiremos… por la sabiduría de Pérez Alfonzo se crea la OPEP para negociar entre el que posee la fuente y el que la procesa, controla y consume, pues bien, la mayor tarea que emprende el gobierno de Obama es esta: superar la dependencia energética, en el caso concreto, del petróleo. Su ministro secretario de energía,  Steven Schu es premio Nobel de Física, pero no uno cualquiera, sino quien tiene una muy clara concepción de las relaciones hombre -naturaleza.  El otro campo en el dominio de la energía está en la más alta comprensión y dominio en las relaciones con la naturaleza, incluyendo programas macro y micro, microbiologías, biogenética y escogió a dos profesores de los más altos méritos, la Profesora  Jane Lubchenco tiene la responsabilidad en la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera y el equipo de John Holdren, premio Nobel de la Paz, por sus aportes en materia del cambio climático” (Analítica 2008).

Perdone usted lector mis “auto-citas” pero nos permite fijar elementalmente el asunto que nos ocupa. Hacer un balance, aún muy rápido, de la obra  de Obama, sus éxitos y sus fracasos, requiere mucha información, dominio de la lengua inglesa y en esta situación digo: “solo se que no se nada”;  bajo esta opacidad, perdone mi audacia, empero, sea bueno decir que los EU bajo su dirección superó la crisis económica más severa conocida  desde la del 29. Que el crecimiento económico queda  en positivo, que los índices de desempleo bajaron, que en política internacional será  “el miranda”, es decir, el precursor de la desaparición de la dictadura cubana, sembrada como  la “felicidad” en sus víctimas. Tratado con Irán sobre la energía atómica. Que tuvo consciencia de dejar a Chávez quieto porque conocía plenamente que ese ser carecía de la menor idea teórica, que  todas las muletillas  del hombre nuevo y el socialismo del SXXI son  basura  y sus consecuencias el hambre, la perversión,  la tiranía  se pueden exhibir para el resto de América y el mundo como la expresión de la barbarie más grotesca de la historia. Pero llegó más, penetró con eficacia el Caribe debilitando la chequera de Chávez… avanzó en los servicios de salud, brindó apoyo a programas de investigación de alto nivel.   Debilidades muchas en los conflictos de Medio Oriente, pero… se creó una atmósfera mucho más abierta y, desde luego,  llena de esperanzas sin Osama  bin Laden. . .

Pero, perdió la Hillary, a quien se pensaba sería  continuadora de ese proyecto cultural amplio y  más humano y,  en su lugar,  renace  el Ku Klux Klan. Se regresa al “patriotismo”,  se vuelve a las concreciones racistas, se promete la vuelta al sueño americano y a su hegemonía sobre el resto del mundo.  Surgen interrogantes más que respuestas. Negros en su mayoría  electores de Hillary,  mientras  los “latinos”  más del 43% en todo EU  y en  Florida más del 55% por Trump (nadie a ciencia cierta  sabe qué es eso, ser latino,  pues no es precisamente una etnia, una “cultura” que le dé  coherencia y cohesión  y ni  aun el lenguaje tiene la sustentación necesaria…). Y obviamente blancos de todas partes hasta caucásicos (grotesca e inconsistente expresión de complejos espacios y curiosas diferencias  con  los “otros” blancos).  A nivel del discurso político y el de imagen  se regresa a estadios de primitivismo salvaje, comparable a la lengua de Chávez o Maduro. Ni Hillary pudo zafarse de la  impúdica  habla de Trump y frágil fue su propia lengua. Mi hijo Americo me regaló una imagen, en Venezuela hubo una canción de una señora Castillo (¿?) tuvo gran éxito con una cancioncita que gritaba, “usted está enfermo/usted también. Ud.  come  chimó/usted también…era que no me acordaba y de pronto me acordé…

Este hecho expresa bien un problema mayor,  el problema  político, las inmensas  fallas, vacíos  e injusticias de la democracia,  vacíos de teoría, de ética y estética, mero Marketing, lo cual podría ayudar a comprender el porqué triunfó Trump. La vuelta a lo meramente instintivo, la manipulación del miedo y su engendro, el odio; las conspiraciones que permiten atribuir al otro las responsabilidades que le competen.  (Hitler culpó a los comunistas, judíos… el Macartismo al comunismo, Chávez- Maduro, etc…al imperio, la guerra económica y otras falacias más. En la oposición venezolana se culpa a Cuba sin interrogamos qué hemos hecho mal). También podría ser expresión de lo que Ludovico Silva llamaba conducta conservadora de los campesinos.

Ya han aparecido esbozos teóricos sobre la conducta del elector  de EU. Los “latinos” triumpfistas se cree que actuaron, unos,  atendiendo al discurso de los cubanos maiameros que allí tienen el poder económico e influencia política e ideológica, y que en su insania culpan  a Obama de favorecer el terrorismo  cubano,  que desde siempre ha hecho del bloqueo  su mejor negocio, su placer por encima de la tragedia cubana. La paradoja siempre estuvo como verdad. Tanto  el fidelismo como el cubanismo maiamero se han beneficiado en grados inconmensurables del bloqueo. Para Fidel, la conspiración imperialista impide su progreso, su desarrollo y justifica la defensa de la Isla, con ellos a  su cabeza. Los cubanos maiameros sin ese negocio habrían debilitado su discurso  político y sus rentas. Pero, los otros,  lo más grave de esta conducta “latina” es la garantía de su seguridad. Para ellos, sus problemas están resueltos.  Viven allí y los nuevos venidos ponen en riesgos su propia estabilidad económica y emocional.

De gran significación es la conducta de los negros. Los negros norteamericanos desde hace siglos apuestan a la libertad no al racismo y muy menos al apartheid “negro” afro descendiente contra otros bichos blancos euro descendientes… Honra a la memoria de Clay y M Luther King, a los inmensos artistas, músicos, poetas, científicos, atletas etc. negros que han tenido plena consciencia de que la libertad de los negros y de todos está en la libertad  de todos.  Ruego a usted, lector, me ayude para mejorar esta modesta reflexión.

Pero, ¿y Venezuela qué?   Los efectos de la política de EU nos tocan de cerca. “Cuando los Estados Unidos se resfrían a los mexicanos les da pulmonía” o algo así se dice en México. Nosotros estamos en  peor situación.  Esos perversos gringos, gritan Maduro, el afro descendiente Aristóbulo, el “caucásico” Diosdado, el venerable beatífico  JVR  etc. nos invadirán para llevase nuestro petróleo. Ya esa “conspiración” es una imbecilidad descomunal. El petróleo quedará a plazo muy cercano para los países más pobres, menos desarrollados en el ámbito científico y tecnológico. Las mismas China,  la India, Arabia Saudita,  aceleradamente están coparticipando en la búsqueda  de energías que,  por comodidad,  llamo sustitutivas. Pero si estos HP (Horse Power, así en inglés por su inmenso poder) pensaran un instante, sólo un instante pensaran,  entenderían que con quitarnos la penicilina y otras medicinas básicas para control de diabetes, cáncer,…moriríamos muy pronto sin que el imperio “invirtiese” un solo misil.  Entenderían que el único camino para enfrentar “imperios” es la ciencia, la técnica y nos  preservarnos como cultura en el y con el  arte. Que hoy son las únicas formas de producir, de crecer, de ser y de existir.

Trump es apoyo a los Brexit, a los neonazis europeos, los nacionalismos, chauvinismo, fascismo, populismo de derecha, al putismo, a la hegemonías, es vitalizar el terrorismo como acción libertaria…pero una cosa piensa el Trump y otra el pueblo de los Estados Unidos y los pueblos y la cultura del mundo. Allí estamos juntos o gana la consciencia o perecemos todos, incluso ellos.