No es capricho: Venezuela no debe ingresar a MERCOSUR
Independientemente de las actitudes de las gentes de Argentina,
Brasil y Chile -que con Y sin razón- tradicionalmente han visto al resto
de Suramérica solo cuando miran hacia abajo, aparte de eso (que no enteramente se explica por prejuicios y arrogancia, sino
también por una especie de auto-aprecio, mas o menos sobrevalorizado por
la -innegable, inevitable y muy conspicua- influencia europea, debido a
la voluminosa inmigración de gentes europeas -no peninsulares- hacia
esos países, quienes -por alegadas razones de civilización vs. el
indigenismo prevaleciente en Suramérica a la llegada de esas gentes
(respire fuerte amigo/a lector/a)- se ven diferentes, y lo son, en
cuanto a sujetos emprendedores productores y productivos),
independientemente de eso (aunque es sumamente importante para poder
entender esas actitudes y su relevancia e influencia en lo concerniente
a integración) está por otro lado la realidad. Y la realidad es que
Argentina, Brasil y Chile han logrado cohesionarse y han organizado un
sector privado dinámico, capaz de hacer progresistas y prósperos a sus
respectivos países, aun cuando no se hayan deslastrado de la indebida
interferencia del sector publico que agobia y retraza a la democracia.
(2) Por ello no es raro que esos tres países hayan ideado el esquema
MERCOSUR, sea o no sea realista o conveniente. Desafortunadamente
lograron incluir a Paraguay y a Uruguay. Creo que ese esquema no le
sirve a los tres grandes y mucho menos a los dos chiquitos. Basta leer
la prensa para saber por que.
(3) Pero hay mucha gentes -cualesquiera sean las razones. validas o no
validas- que dudan sobre la conveniencia de MERCOSUR, pero también hay
quienes ven las diferencias entre los países que hacen inviable ese
esquema. En reciente escrito, un político argentino de relieve se
expresa en términos que vale la pena recalcar:
(i) Argentina se ha convertido en un país aislado;
(ii) habría un aliviante retorno al eje del ABC
(Argentina-Brasil-Chile) alrededor del cual se hizo MERCOSUR; entonces
Argentina y Brasil éran dos países mucho más parecidos que ahora;
(iii) después de veinte años Brasil esta tratando de afianzarse en
el mundo, pero no Argentina;
(iv) las discrepancias en la reciente sesión de la ronda de Doha en
Ginebra revelan que los intereses de Argentina y de Brasil son muy
divergentes;
(v) Ambos países cada día son mas distintos.
(vi) Brasil puede negociar mayores liberaciones arancelarias porque sus
industrias y servicios se fortalecen, al contrario de los argentinos;
(vii) la Unión Europea comunicó que, si el Mercosur no se dinamiza,
continuará sus negociaciones con cada país por separado (léase:
Brasil);
(viii) Brasil ya se buscó socios como Rusia, India y China;
(ix) MERCOSUR ya esta languideciente ;
(x) para Argentina y Brasil cada día resulta más difícil tratarse
como iguales;
(xi) Lula dijo algo que ningún otro gobernante había dicho: Brasil, como
país mayor y más importante, debe trabajar para lograr un equilibrio
en nuestro continente.
(xii) Brasil se mueve a contrapelo de la hostilidad de Chávez hacia
Uribe y su vinculación con Washington, el Plan Colombia y la IV Flota,
viene de firmar un acuerdo militar, de defensa y de lucha contra el
narcotráfico y el terrorismo ∑ solo con Perú y Colombia. Nada de
Chávez…
(Quien ha dicho todo eso referido en los anteriores incisos (i al xii)
es un ex-vicecanciller de Argentina, Andrés Cisneros. Ver su Artículo La
visita de Lula publicado en Analítica el 15 del corriente).