Opinión Internacional

Los Yanquis 10, Chávez 0

Ya sabíamos que el hedor de los 100 vagos que se metieron con Zelaya en la Embajada de Brasil, para jugar a héroes con él, con sus efluvios malolientes de apiñados y en dos baños, terminarían por nublar el juicio del astuto sombrerúo, que sin embargo y por ambicioso, malogró su Presidencia y metió a Honduras en un pandemónium, por andar de parejero del subversivo Chávez, a quien solo le interesaba posar de libertador, regalando nuestros reales, armando el Lego de su imperio de juguete del que medran los gobiernos lambusios del ALBA.

La defenestración de Zelaya enredó, para variar, la complicada política exterior norteamericana, sujeta a consensos bipartidistas y al resultado de luchas implacables de todo tipo de lobbies de intereses muchas veces contrapuestos, dentro de ese Estado “imperial”, que asume la dirección democrática del mundo, y que por supuesto los ignorantes del gobierno venezolano rojito no alcanzar ni siquiera a entender.

Las 7 bases militares USA en Colombia por las que tanto chilla Chávez sermoneando a Obama, para que se las quite de su trasero, y las 2 nuevas de Panamá fueron, entre otras causas, derivadas como respuesta al plan subversivo regional del propio Chávez y sus aventuras en América Central y Honduras en particular. Coge luces aprendiz. Solo te usan mientras andas por allí esponjado, como si fueras líder mundial, mientras que por tu incompetencia absoluta nuestro país colapsa en sus servicios públicos básicos y como remedio nos mandas a bañar a oscuras, con totuma, faltándote solo recomendar la tusa para otros efectos…

La crisis hondureña necesitó 4 meses para que los diplomáticos experimentados, como el señor Shanon, convencieran a la Clinton y Obama y por su vía a los sigüieses del mundo entero, a reconsiderar en un 90% sus acusaciones contra el gobierno Micheletti y sobre todo — como ahora lo dice Shannon– “RESPETANDO LA INSTITUCIONALIDAD DEMOCRATICA HUNDUREÑA”.

En esa frase está todo, hasta la justificación a posteriori, aunque vergonzante, del “golpe” que inicialmente hicieron condenar a nivel mundial, hasta retratándose al lado de la diplomacia oportunista y aventurera de Chávez, en la OEA.

Planteé hace poco que Zelaya había roto con Chávez, para poder salir del laberinto locoide en que se metió al entrar clandestinamente a Honduras y asilarse en la embajada brasileña, esperando una “insurrección de su 13 de Abril” que se habían prometido entre coberos, ilusos o forajidos.

Chávez metió tanto embuste respecto a su reposición del 13 -14 de Abril de 2002, que terminó creyéndose su propio cuento. No fue el pueblo Chávez, entérate. El que te devolvió el coroto fue el Ejército, del que el General Baduel logró el control de liderazgo, a partir de las torpezas infinitas de Carmona, que terminaron arrasando la autoridad del General “rapidito” Vázquez Velazco y su alto mando, quien ayudó a reponerte, a las 48 horas de haberte sacado, en medio del “vacío de poder” provocado tras una impresionante insurrección civil el 9-10 y 11 de Abril.

El plan del asilo locoide y su final de opereta, le dará a Zelaya unas ganancias mínimas, como para no quedar limpio y errante en el mundo, hablando por su celular y estrenando sombreros, dependiendo solo de la “chequera que camina por América Latina” ahora despechado.

En las “negociaciones” Zelaya termina “exigiendo” “que sea el Congreso quien lo restituya” mientras Micheletti insistía en que debía ser una resolución del Tribunal Supremo, que fueron quienes lo habían mandado a poner preso y sacarlo 4 meses antes.

El sainete político estaba ya armado. Micheletti al final finge ceder ante el yanqui Shannon y acepta que SEA EL CONGRESO, previa consulta al Tribunal Supremo. ¿Cómo no adivinar que Zelaya ya se había entregado, cuando hizo suya la propuesta que el Congreso resolviera? ¿No es este acaso el mismo Congreso que había designado a Micheletti?

Ese es el final lógico del famoso Plan Arias, plan Obama-Clinton, que era la puerta de salida honrosa que Zelaya, reacio al principio, fue aceptando hasta tragarlo entero con la misión Clinton- Shannon.

Es posible que hasta esté contemplado que Zelaya asuma por unos días, después de las elecciones una Presidencia ficticia, solo para la transición, estrictamente simbólica, como premio de consolación.

Pero para efectos de aquel plan tronante de sabaneitor, ya está lejos aquella práctica anexión de Honduras al chavismo, alineándose el gobierno para la convocatoria de su constituyente fraudulenta,–nacida de la llamada cuarta urna- que daría reelección indefinida, lo que tanto entusiasmó a Zelaya y mientras Chávez se veía de nuevo en la principal plaza pública de Tegucigalpa: mandando a meterse por el c… –según sus estrictas palabras en ese mismo escenario– las resistencias al ALBA por parte de la “oligarquía hondureña y los yanquis”.

Con estos acuerdos de ayer, cualquiera sean los detalles finales de cómo se cumplan, lo importante es que habrán elecciones reconocidas. Honduras no abría interrumpido la vigencia de su Constitución que resistió, con sus instancias de separación de poderes y jurisdiccionales, los embates de Zelaya-Chávez y al propio tiempo es muy difícil que sigan aceptándose los simplismos chavistas y de sus chulos para enjuiciar a Micheletti y las FFAA hondureñas. El político Micheletti resultó de gran talla, logró capear el temporal…hasta fingiendo retrocesos cuando ponía a los adversarios a escoger entre sus opciones.

Con razón los chavistas empezando por Chaderton en la OEA están amargados con que Honduras vuelva a la normalización. El show chavista terminó… y mal para sus actores principales.

Honduras sin poder de chavistas, 7 bases en Colombia, 2 en Panamá: Los Yanquis 10 Chávez 0

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