“El Imperio” Parece No Estar Confinado
“El Imperio” Parece No Estar Confinado
al Espacio entre México y Canadá
Y no es político, ni social, ni militar, sino claramente económico
Algunos neo estalinistas americanos liderados por el caudillo habanero; cual Ingeniosos Hidalgos; Quixotes de La Mancha, a más de cinco décadas de la muerte de Iosif Vissarionovich Stalin, continúan todavía asuzando a los pueblos que dirigen, y a sus vecinos y aliados en contra de un supuesto “imperio” que también supuesta y maquiavélicamente, trabaja 24 / 7 —desde el territorio ubicado en América del Norte, entre México y Canadá—para impedir la llegada hasta los “oprimidos”, del Nirvana socialista expuesto por los pensadores alemanes Karl Heinrich Marx y Friedrich Engels, en su Manifiesto Comunista de 1848.
La almendra del socialismo marxengelsiano; como la llamaba el insigne intelectual venezolano Carlos Rangel, es la eliminación de la propiedad privada y entregar el control de los medios de producción a una dictadura del proletariado [eufemismo del conjunto mundial de trabajadores asalariados], concepto que Mao Zedong y los socialistas latinoamericanos expandieron para que incluyese; primero, a los campesinos, y posteriormente a las etnias aborígenes habitantes de la América ubicada al sur del Río Grande y que sobrevivieron a la conquista española.
Sin embargo, el viernes 15 de noviembre de 2009, el Grupo de los Veinte (G-20), alianza internacional conformada por muchos más países que los veinte que supone su nombre—ya que uno de sus miembros es la Unión Europea—emitió al mundo una declaración oficial sobre sus objetivos ante la actual crisis financiera global, que en uno de sus párrafos afirma:
“Nosotros reconocemos que estas reformas sólo serán exitosas, si se fundamentan en un compromiso con los principios del libre mercado; incluyendo al imperio de la ley; el respeto a la propiedad privada; la apertura al comercio y a la inversión; mercados competitivos y sistemas financieros eficientes y efectivamente regulados. Estos principios son esenciales para el crecimiento económico y la prosperidad, han levantado a millones de la pobreza; y han elevado significativamente el estándar de vida global. Reconociendo la necesidad de mejorar la regulación del sector financiero, estamos obligados a evitar la excesiva regulación que pondría en peligro el crecimiento económico y agudizaría la contracción de los flujos de capitales, incluyendo a los países en desarrollo.”
Esta declaración conjunta proviene de países de todos los continentes de la Tierra; y no sólo incluye a todos los países altamente desarrollados y a los económicamente emergentes, sino también a países en desarrollo—demostrando contundentemente la globalización de la economía del libre mercado que los socialistas llaman erróneamente “capitalismo” y “neoliberalismo”—palabras obsoletas y no apropiadas para describir al mundo actual o a cualquiera de sus países en particular.
Firmaron esta declaración los representantes diplomáticos de (1) Alemania, (2) Argentina, (3) Arabia Saudita, (4) Australia, (5) Brasil, (6) Canadá, (7) China, (8) Corea del Sur, (9) Estados Unidos de América, (10) Francia, (11) India, (12) indonesia, (13) Italia, (14) Japón, (15) México, (16) Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, (17) Rusia, (18) Sudáfrica, (19) Turquía, y la Unión Europea en representación de (20) Austria, (21) Bélgica, (22) Bulgaria, (23) Chipre, (24) Dinamarca, (25) Eslovaquia, (26) Eslovenia, (27) España, (28) Estonia, (29) Finlandia, (30) Grecia, (31) Holanda, (32) Hungría, (33) Irlanda, (34) Letonia, (35) Lituania, (36) Luxemburgo, (37) Malta, (38) Polonia, (39) Portugal, (40) República Checa, (41) Rumania, y (42) Suecia.
La evidente diversidad cultural, étnica, social y política de esta alianza internacional, debería hacerle ver a los neo estalinistas que el “imperio” contra el cual supuestamente luchan es tan inexistente como los enemigos del Ingenioso Hidalgo Don Quixote de La Mancha, en las caballerescas justas en las que se involucró; éste, el más famoso de los personajes creados por Miguel de Cervantes Saavedra.