Agentes del imperialismo
El Iluminado de Sabaneta, salió corriendo a asumir su puesto de combate, su lugar de “batalla”, que no es en el campo dirigiendo tropas o exponiéndose al fuego enemigo. Su puesto de batalla, se encuentra frente a las cámaras de VTV y TELESUR, en la seguridad del Palacio de Miraflores, y rodeado de sus “anillos de seguridad”. Y ¿qué fue la batalla esta oportunidad? Bueno una velada a amenaza al pueblo y al gobierno hondureño, a quienes hizo responsables por integridad de los “periodistas” del Canal del PSUV (Canal 8-VTV) y de su agencia propagandística TELESUR.
Algunos sectores gremiales y medios bien intencionados y en protección de la libertad de expresión, incluida Globovisión, protestaron por la retención y posterior salida de Honduras de los empleados de ambas estaciones de televisión. La versión oficial hondureña dice que la cancillería de ese país, aún bajo la presidencia de de Zelaya, alquiló 90 automóviles a la empresa Econo RentaCar , para ser utilizados en la consulta electoral que iba a tener lugar el 28 de junio. La empresa no recibió los vehículos al vencimiento de los contratos y denunció la desaparición de los automóviles en la policía. Varios de ellos fueron encontrados en poder los equipos de TELESUR y VTV y otros ciudadanos venezolanos, lo que dio lugar a su arresto y traslado a estación policial.
Independientemente de si la versión oficial es cierta, cabe preguntarse, si efectivamente esos “periodistas” trabajan para informar oportuna y verazmente sobre los sucesos en la nación centroamericana o eran agentes de los gobiernos a los que sirven.
Esto señores son, en primer lugar, funcionarios públicos del Estado venezolano, porque tanto los de VTV como los de TELESUR son empleados del gobierno venezolano pagados con dinero del pueblo. Funcionarios que obedecen a los dictados del Iluminado de Sabaneta y que son simples peones en el ajedrez político que éste pretende jugar en otras naciones latinoamericanas y en este caso particular en Honduras, en donde afortunadamente le dieron “jaque mate”. TELESUR, en teoría una empresa multiestatal, que representa los intereses de los gobiernos que son socios del mismo: Bolivia, Cuba, Ecuador, Nicaragua y Venezuela. En otras palabras, TELESUR es una herramienta de esos gobiernos antidemocráticos afiliados al ALBA, grupo vividores que maneja a su antojo el Iluminado de Sabaneta con su potente chequera. En otras palabras, VTV y TELESUR son canales de TV que no está al servicio de la información libre, oportuna y veraz, sino que son voceros propagandísticos al servicio de esos gobiernos. Y eso a mi juicio, convierte a esos funcionarios públicos venezolanos, en territorio hondureño, en agentes de gobiernos de potencias extranjeras. En agentes de Imperialismo chavista.
Respetando la opinión del CNP, que afortunadamente ha resucitado con fuerza y entusiasmo, del SNTP que siempre ha estado vigilante y activo en la defensa de la libertad y de mi canal Globovisión, a mi juicio estos “periodistas” no estaban allí en función de informar oportuna y verazmente sino cumpliendo tareas de activistas políticos en la ejecución de los fines imperialistas de Hugo Chávez, quien pretendía apoderarse del poder en ese país por intermedio de su procónsul, Mel Zelaya.
Por otra parte, basta revisar las transmisiones de ambos canales sobre la situación hondureña, para observar que su tarea no fue la de informar, sino de tratar de crear zozobra, incertidumbre y agitación en la población hondureña. Otros canales internacionales que están operando en Honduras, y no precisamente a favor del nuevo gobierno, han actuado con plena libertad porque se han limitado a informar y opinar, que no a incitar al odio y al enfrentamiento armado entre hondureños como sistemáticamente se hizo a través de TELESUR y VTV.
A esas consideraciones habría que añadir, las amenazas del Iluminado y su combo del ALBA de “derrocar desde adentro o desde afuera” al nuevo gobierno hondureño. Bolivia, Cuba, Ecuador, Nicaragua y Venezuela son gobiernos hostiles a Honduras. Y resulta más que evidente, y la prueba está a la vista, que en este caso concreto, estos dos canales y sus “periodistas” estaban actuando como instrumentos del Golpista Mayor, para lograr ese objetivo. Ambos canales se dedicaron, ante la paciente mirada del nuevo gobierno, a agitar e incitar a la población a la violencia.
De manera que la retención y expulsión de estos “periodistas”, independientemente del asunto de los automóviles, es una medida que tomaría cualquier gobierno en contra de los agentes de gobiernos extranjeros hostiles que pretenden su derrocamiento y que estaban actuando abiertamente en ese sentido.
Y a propósito de este caso, los venezolanos, nuevamente, tenemos la oportunidad de comprobar el caradurísmo y el doble discurso del Iluminado de Sabaneta. Alarmado y preocupado por ese “atropello” a la libertad de expresión!!!, cuando él ha ordenado el hostigamiento, detención y expulsión de más de un corresponsal y visitantes extranjeros, incluidos parlamentarios y candidatos presidenciales, por atreverse a manifestar, o insinuar su desacuerdo con las políticas y acciones de su gobierno forajido. Y el colmo es el caso de Leocenis García, preso por denunciar a uno de los “peso pesados” de la corrupción chavista. Para no llover sobre mojado, no voy a describir su política de extinción de los medios de comunicación independientes que todo el país conoce en detalle. Ahora se encamina a un nuevo record Guiness cuando pretende cerrar 240 emisoras de radio y 45 de TV.
No sé si los deportaron o los amenazaron y salieron en carrera, como buenos chavistas, pero me parece justificada la posición del nuevo gobierno. Está bien ser ingenuos pero no tanto, porque entonces se deja de ser ingenuo y se convierte uno en pendejo.