Rafael Brito, un “Pollo” que es gallo en su corral
Giselle, Rafael Alejandro, Andrés, Adrián y Micaela… Nada menos que cinco hijos. Para algunos podría sonar a multitud, pero, ¿quién dijo que a un gallo le gusta estar solo en su corral? Es que Rafael “Pollo” Brito no solo se destaca por su ingenio musical; también resalta el cuidado que tiene de sus polluelos.
Este artista nació en Los Teques, en el seno de una familia “normal”, como él mismo alega: “No puedo decir que está integrada por músicos, pero sí por personas con inclinación hacia este arte. Ahora bien, el único músico de profesión soy yo”.
Pero ese interés melómano que había en su hogar no podía pasar en vano. Fue así como de pequeño empezó a estudiar oboe en la Orquesta Nacional Juvenil del estado Miranda. Además, aprendió cuatro, mandolina y guitarra en la Estudiantina José Obrero, se profesionalizó en el Conservatorio Nacional Juan José Landaeta y el Conservatorio Superior de Música Simón Bolívar.
Su formación académica se complementó con la experiencia en distintas agrupaciones para dar nacimiento a un estilo propio, caracterizado por la fusión de géneros tradicionales con alternativas urbanas. A manera de broma dice: “Mi propuesta musical es mía de mí. Punto. Considero que es el resultado de todos estos años de trayectoria”.
Es que, a decir verdad, el “Pollo” ha estado en muchos conjuntos venezolanos. Para muestra, algunos botones: Nazarenos de la gaita, Sabor en gaita, Los Morillo, Maragaita, Décima gaitera, A lo zuliano, Sabor zuliano, Saúl Vera y su ensamble, Claudia Calderón y Back Trío, entre otros.
Tarea titánica
Para ser francos, el hecho de tener una agenda repleta de conciertos, grabaciones y encuentros con la prensa, le complica a este cantante sus funciones como padre. “Es un trabajón. No todo ha sido feliz, porque en una familia hay problemas. Pero lo importante es que, gracias a Dios, logramos solucionarlos y seguimos avanzando”.
Aunque cada uno de sus hijos tiene su propia personalidad, Brito se ha encargado de que a todos les guste la música: Giselle –la mayor– es cantante y flautista; Rafael Alejandro, percusionista de la Orquesta Sinfónica del estado Miranda; Andrés, cantante y diseñador gráfico; Adrián también canta y le interesa la fotografía; “y Micaela es una pequeña de cuatro años que lo que está es gozándose la vida”.
Según afirma, “la fábrica está parada desde hace rato”, así que –a menos que sea por algún descuido– Micaela –hija que tiene con su esposa, Ana Maria Simon– se queda como la menor de la familia. “Los primeros tres pertenecen a mi orquesta. Los dos menores aún no tienen la edad, pero sería muy especial que en un futuro tengamos nuestra propia agrupación”.
Festejando triunfos
Actualmente, el “Pollo” celebra las 50.000 copias vendidas de su más reciente producción discográfica, Pa’ Tío Simón, y se encuentra en etapa de finalización de dos álbumes: un homenaje a Armando Manzanero y otro a Barquisimeto.
Además, es jurado del programa de talentos TV Libre, en Televen, y forma parte del musical “Aire”, en el que comparte tarima con Diana Patricia “La Macarena”, Francisco León, Kiara, Mariaca Semprún y Elisa Rego, entre otros.
Pero más allá de los triunfos artísticos, este venezolano celebra los éxitos de la casa. “Fíjate que a mi hija mayor la tuve cuando tenía 21 años y ya ella va para 23. Es increíble que ya haya pasado tanto tiempo. Me siento feliz por tener una familia tan hermosa. Es que, para mí, ser papá no es un juego: se trata de ser un modelo a seguir, de brindar cariño y amor. Ser papá es entender que la familia está antes que cualquier otra cosa. Ser papá es vivir en pro de tu hogar”.