Der Untergang: El ocaso de un régimen
A finales de 1942, gran parte de Europa había sido conquistada por las tropas de la Alemania nazi. Pero dos años y medio después la situación se había revertido. En todos los frentes el ejército alemán había sido hecho retroceder hasta su propio territorio y sus ciudades más importantes habían sido reducidas a escombros por los masivos bombardeos aéreos de las fuerzas aliadas. Alemania había perdido, además, todos sus aliados, por lo cual el Tercer Reich se encontraba frente al derrumbe inminente.
El filme
Der Untergang (ocaso, caída, ruina, desmoronamiento) es un conocido filme alemán estrenado en 2004, que presenta el ocaso del Tercer Reich, pero especialmente los sucesos ocurridos en el bunker de Hitler, ubicado en el subsuelo del jardín de la Cancillería del Reich en Berlín, durante los últimos días de la segunda guerra mundial hasta el suicidio del dictador. Afuera, desde el este, se desarrollaba la batalla de Berlín, furiosamente conducida por el Ejército Rojo y su deseo de venganza. Por el oeste el ejército estadounidense también se aproximaba.
El año siguiente, el filme fue nominado al Oscar en la categoría del mejor en idioma extranjero.
¿Parecidos con la actualidad venezolana?
Hitler, nacido en Austria, cumplía 56 años el 20 de abril de 1945, cuando el fuego de artillería soviético alcanzó por primera vez el centro de Berlín. A pesar de los consejos de sus generales, quienes le explicaban lo desesperado de la situación, no quiso abandonar la ciudad. Creía todavía en la victoria final y en su visión de un imperio germano mundial. Había perdido el sentido de la realidad. Reaccionaba con furia histérica ante los consejos. Tildaba a sus generales de cobardes y traidores. Por primera vez hablaba de la posibilidad de perder la guerra y manifestaba, que primero se suicidaría antes que abandonar Berlín o capitular.
Sus generales estaban desesperados. Por un lado, aún se sentían obligados a su voluntad y por otro veían la imposibilidad de cumplir sus órdenes. En sus decisiones, a Hitler ya no le importaba lo que le sucediera a la población civil; más aún, decía, que sin él, el pueblo alemán enfrentaba su ruina merecida. Estaba acorralado. En un esfuerzo inútil, expresión de su locura, hizo instruir a ancianos y adolescentes, como una especie de milicia, en el uso de las armas para defender la capital.
En este punto, la mayoría de los dirigentes políticos había abandonado Berlín dándole la espalda a Hitler, como Hermann Göring el jefe de la Fuerza Aérea, Heinrich Himmler el temido jefe de las SS y el arquitecto Albert Speer, a quienes insultaba como traidores. Speer recibió la orden de destruir la capital, para que el enemigo solo encontrara devastación y tierra arrasada. No hizo falta, pues los soviéticos se encargaron de ello. Hizo fusilar en esos días al cuñado de Eva Braun, por deserción, a pesar de las súplicas de ésta. Permanecieron con él su mujer Eva Braun recién desposada, su ministro de propaganda Joseph Goebbels con su familia y Martin Borman, secretario del partido, así como sus dos secretarias y guardianes de confianza.
Hitler y Eva Braun tomaron cápsulas de cianuro. El primero se disparó inmediatamente en la cabeza. Sus restos fueron incinerados en las afueras del bunker. Era el 30 de abril de 1945.
Pocos días después la Alemania nazi se rendía incondicionalmente.
El fracaso gubernamental venezolano
El profundo deterioro de las condiciones vitales de la población venezolana, profusa y suficientemente documentado a través de numerosos análisis y opiniones autorizados de organizaciones, especialistas y personalidades de dentro y fuera del país, indican abrumadoramente el fracaso de la actual gestión gubernamental. La conclusión unánime es, que para la salud de la nación es necesario que tal gestión cese en sus funciones, ya sea por la renuncia presidencial acompañada de sus funcionarios clave, el sometimiento sin dilaciones pseudolegales al referendo revocatorio para el año 2016, como ya fue solicitado por la oposición democrática o la convocatoria a una asamblea nacional constituyente.
Mención particular amerita el asunto del revocatorio, cuyos potenciales resultados desfavorables al régimen, bajo ninguna circunstancia serían aceptados por él, vale decir, por los hermanos Castro. ¡Es que tienen tanto que perder! Importante asunto es saber si la oposición está preparada para esta eventualidad. Viene al caso recordar lo que sucede con el desconocimiento gubernamental de la Asamblea Nacional, legítimamente ganada por la oposición democrática.
Salvando las distancias con el régimen nazi-fascista, el de Venezuela refleja, actualmente, coincidencias con los últimos días del hitlerismo. Su proyección hacia el aislacionismo regional latinoamericano, producto de nuevas tendencias políticas expresadas en elecciones democráticas en otras naciones y del agotamiento de la chequera „compradora-de-conciencias“ así lo demuestra. Es notoria la enfermiza desconexión con la realidad venezolana, que lo mantiene en un mundo idealizado y delirante, en el cual Venezuela estaría destinada, herencia de la ofuscación y megalomanía chavista, a ser una potencia mundial en múltiples sectores, particularmente económicos. ¿Destruyendo al sector productivo privado?
Es evidente la represión a ultranza sufrida por la oposición democrática, al emplear la tortura, la mentira y subterfugios jurídico-legales para acusar y condenar a opositores relevantes, pero sobretodo, mostrando un envilecido abuso de poder que quebranta sin misericordia a la Constitución.
¿Y qué decir de aquellas organizaciones, supuestamente de extracción y responsabilidad civil-comunal, investidas ahora con el poder de las armas, para controlar el orden interno ante una supuesta conmoción nacional, como brazo armado delincuencial del partido político de gobierno? Aparentan ser, también, una extensión del desprestigiado componente de la milicia, cuya creación fue violatoria de la Constitución, para hacer el trabajo sucio que no desea la Fuerza Armada. Su destino es ser transformadas en nuevos rabiosos y salvajes „colectivos“.
Es tal el deterioro del régimen, que ya se escuchan, abiertamente, voces disidentes de militares de alto rango, antiguos funcionarios hoy retirados. Pero, ¿son sinceras sus expresiones, que ameriten ser consideradas? ¿Cuántos habrá, también civiles colaboradores, preparados para abandonar al Presidente, con lo que se incrementaría su soledad y aislamiento, terminando así como un simple desecho histórico?
Ocupados algunos de ellos en actividades extramilitares dudosas, no son sus generales activos quienes alertan al jefe sobre el extremo deterioro de la situación global del país. Al contrario, lo aupan públicamente, violando la constitución, a continuar como sea en el mandato y condenando a la oposición democrática, representada en la Asamblea Nacional, a la que equiparan con la oligarquía y no con el pueblo. Intromisión pervertida y error ideológico. La inspiración castrista es palpable.
La muerte del régimen cívico-militar que gobierna está programada, medida con otros criterios que refuerzan los argumentos presentados. Se explica por la aplicación de una simple condición biológica conocida como apoptosis, provocada por el propio organismo como defensa interna para beneficiar al resto del organismo, liberándolo de daños mayores porque el daño en cuestión ya no puede ser reparado. Muerte programada.
Ya es intolerable la destrucción de la República, iniciada sistemáticamente por Chávez, el intruso, a través de la más pura fuerza bruta gubernamental expresada continuamente por medio de los decretos habilitados.
Realidades adicionales
Este estado de cosas apunta claramente hacia una condición suficiente para concluir sobre el inevitable Untergang del régimen castro-chavo-madurista.
Sin embargo, para reforzar lo anterior no pueden dejarse de lado otras crueles y perniciosas manifestaciones de la ineficiencia y desidia gubernamentales, conscientes o no, mostradas ante numerosas necesidades básicas que afectan directa e inmediatamente a la poblacion: el hambre, mucha hambre, hambre extrema, que asemeja a la de un país en guerra y que inexorablemente conduce al saqueo, que se incrementa aceleradamente, así como la crisis hospitalaria y la carencia de medicamentos para combatir enfermedades de todo tipo. La desnutrición, la mortalidad y el cáncer infantil crecen aceleradamente. La escasez extendida, la carestía total y la explosión inflacionaria general de los precios provocan desesperación ya no únicamente en los estratos más pobres de la sociedad, sino en toda ella. La perversión intelectual del régimen llega al extremo de negar su existencia, para lo cual no faltan funcionarios de variada significación, amedrentados unos y otros prestos a conservar su puesto. Sin alma, sin generosidad, sin nada adicional que decir, al igual que su jefe.
¿Derechos humanos y libertad de expresión y de manifestación? Es solamente una asignatura para vender en el exterior. Solo existe represión ante el ejercicio de un derecho constitucional. En el país, venciendo ingentes dificultades y persecución, la ONG Provea maneja el tema con tal profundidad y honestidad que trasciende al país. Existen muchas otras de elevada eficiencia en el mismo segmento. Lo cierto es, que el gobierno ha dejado sola e indefensa a la ciudadanía. En los hechos, ya no le importa nada de lo que le suceda a la población. Inerme ante la criminalidad desbordada, tolerada y hasta aupada por esferas gubernamentales, se evidencia ante la cínica fusión entre pranes y funcionarios, incluyendo los ministeriales. El régimen la considera como arma política para facilitar el sometimiento ciudadano. Unicamente le importa permanecer en el poder, sin mirar el precio a pagar, para satisfacer su ego y continuar expoliando a la nación.
Se aproxima ya a 300.000 el número de los venezolanos asesinados, sin culpables, durante el mandato castro-chavo-madurista. De los más altos del mundo. Las muertes causadas por los recientes „operativos“ policiales OLP en las barriadas, a pesar del eufemismo, exceden cualquier lógica. La presunción de inocencia cae siempre abatida por un disparo más veloz.
¿Y qué de la libertad, de la que poco se habla y que equivocadamente se supedida a la consecución de una paz incierta y a un diálogo hipócrita? ¿Paz sin libertad? Eso no existe. La libertad, aquélla de la Revolución Francesa, está en juego en el país. En la Alemania nazi toda expresión de libertad fue extinguida, lo que como estrategia fascista facilitó la irrupción y extensión del nazismo y sus crímenes contra la humanidad. ¿Cuál es la paz que deseamos? ¿La de los muertos? ¿La pax romana? ¿La paz bíblica o religiosa? ¿La paz sin justicia y sin ética? ¿O queremos que se nos imponga una paz por las armas, como la que desearía el régimen venezolano, sustentado sobre un uso abusivo del monopolio de las mismas?
También por estos lados tenemos tirano y dictadorzuelo con pinta de locutor improvisado, mal informado y peor hablado, así como sátrapas y mentirosos compulsivos o estudiados, insultadores y difamadores de oficio. Pero, particularmente, ladrones doctos y también ramplones, que saben dónde hay y allí se quedaron.
La masiva corrupción fue la estrategia para engrasar voluntades y arruinar a la economía del país. La depredación fue su herramienta.
Corolario
Los actores y el escenario están preparados para dar comienzo a la función. La calle continúa llamando. La mayoría ciudadana está hastiada. Se siente subyugada. Engañada. Injustamente maltratada. Y quiere gritarlo. Manifestarlo. Para revertirlo.
Tierra arrasada, como la orden del Führer a Speer, es lo que quedaría de ésta que una vez fue llamada Tierra de Gracia, si el régimen, también acorralado, continúa en funciones.
El Untergang del régimen se vislumbra cercano y con él la falacia y la repugnante hipocresía del socialismo del siglo XXI, lo que equivale también a enterrar la pérfida y maldita herencia de Hugo Chávez.