Eposak, turismo sostenible

El turismo es una industria que, según cifras de la Organización Mundial del Turismo (OTM), representa el 10% del PIB mundial (1 de cada 11 empleos), lo que la convierte en uno de los motores que más impulso puede darle al desarrollo de una nación. El economista Esteban Torbar ha estado consciente de esta realidad desde hace años, por eso decidió crear la fundación Eposak, una alternativa para promover el turismo sostenible en Venezuela.

Esta institución –cuyo nombre significa “logro” en lengua pemona kamarakota– se encarga de desarrollar alternativas para mejorar la calidad de vida de quienes habitan en las comunidades que se promueven como destinos.

-¿Cómo inició este proyecto?

-Yo visitaba con muchísima frecuencia al Valle de Kamarata (Bolívar). Uno de los lugareños llegó en una oportunidad y me pidió la ayuda para construir una churuata-habitación. Busqué la ayuda con varios amigos que iban a la zona y entre varios le apoyamos.

Fue allí cuando decidí que debía llevar esa ayuda a otro nivel, por lo que se creó el proyecto. En principio era solo una plataforma de crowdfunding, pero con el tiempo comprendí que esta gente no solo necesitaba apoyo financiero, sino que los turistas fueran a visitarles para que su negocio se hiciera sustentable.

Entonces, ¿qué hacemos nosotros? Llevamos a los viajeros al lugar para que lo conozcan y se conecten con la realidad de la comunidad.

-¿Cuántas personas se han beneficiado?

-Hasta el momento, hemos apoyado a 55 emprendedores en Kamarata y también en Birongo (Miranda).

-¿Qué características debe tener una comunidad para que apliquen el programa?

-Lo que hace que el modelo funcione es que el destino sea único, es decir, que tenga un atractivo turístico muy fuerte; debe ser un lugar remoto, en otras palabras, de difícil acceso y con condiciones socioeconómicas de sus habitantes muy deprimidas; por último, la comunidad tiene que estar dispuesta a organizarse.

-¿Cuál es el proceso para llevar a los turistas a estos lugares?

-Nosotros trabajamos en alianza con agencias que promueven los destinos. Ellos se encargan de llevar a los turistas y nosotros de crear una experiencia con la comunidad.

-¿Cómo funciona el apoyo de los turistas?

-Ellos brindan su ayuda en calidad de préstamo. Nosotros no permitimos que se regale dinero, y eso lo tienen claro nuestros emprendedores. La responsabilidad que asumen las personas cuando piden fondos para sus proyectos es que deben devolver el dinero una vez que lo recuperen.

-¿Cuáles son los titanes con los que luchan día a día?

-Considero que la coyuntura del país es un obstáculo enorme. Por ejemplo, cuando levantamos un proyecto de alguien que quiere hacer un emprendimiento, eso tiene un monto. Ya para el momento que recaudamos el dinero establecido al principio, la inflación se lo ha comido. También está el hecho de que muchas veces no se consiguen los insumos.

Sin embargo, puedo decirte que las ganas que tienen las personas de estas comunidades nos motivan a sacar esto adelante contra viento y marea.

-¿Qué consejo le daría a alguien que desea emprender en su propio negocio?

-Yo siempre digo que uno debe hacer lo que más le apasiona. Es importante entender en qué eres bueno y saber conectarse con personas que van a aportar algo bueno a la organización.