Llámame Chequia, es más sencillo
¿República Checa o Chequia? Desde su divorcio amistoso de Eslovaquia, sus habitantes se preguntan cuál es la abreviación correcta del nombre del país.
Cansados de ver distintas versiones cortas de «la República Checa», varios dirigentes, incluido el presidente Milos Zeman, lanzaron a mediados de abril un proceso para que la ONU registre los nombres simplificados en las distintas lenguas.
En los casos en los que no haga falta usar el nombre formal se recomendará «Czechia» en inglés, «Chequia» en español y «Tschechien» en alemán para traducir el término checo «Cesko». Eso si el gobierno da su visto bueno en mayo.
«Chequia no sustituye a la República Checa», informa el ministerio de Relaciones Exteriores en su página www.mzv.cz.
El tema no está nada claro y es motivo de polémica incluso dentro del gobierno. «No estoy de acuerdo con ‘Chequia», afirmó la ministra de Desarrollo Regional, Karla Sleshtova, que teme que se confunda al país con Chechenia (Chechnya en inglés).
«Los conocimientos geográficos mediocres no pueden impedir el uso del nombre del país», responde el ministerio de Exteriores, que cita como ejemplo otros casos parecidos – Irak/Irán, Níger/Nigeria, Eslovaquia/Eslovenia – e incluso idénticos: Georgia es un país caucásico y un estado de Estados Unidos.
No es el único problema linguístico al que se enfrentan en el extranjero: «Prefiero decir que soy de Praga», afirma Ivana Schachnerova, residente desde 1989 en Italia. «Cuando digo ‘soy checa’ (ceca) todo el mundo se precipita para ayudarme a cruzar la calle». En italiano «cieca» significa «ciega».
Incluso en la República Checa (como se llama el país desde 1993) no hay un nombre corto oficial para designar al territorio.
Hace mucho tiempo era el Reino de Bohemia (Regnum Bohemiae), luego formó parte de la monarquía de los Habsburgo y en 1918 se convirtió en Checoslovaquia.
Encontrar uno siempre fue un rompecabezas. Según cuenta la leyenda fue fundada por un mítico «Ancestro Cech» y reagrupa las regiones históricas de Bohemia, Moravia y una parte de Silesia.
En la época de la independencia surgieron muchas propuestas. Se acabó imponiendo «Cesko», una palabra un poco artificial pero correcta gramaticalmente. No es del agrado de los partidarios de una mayor autonomía regional que aducen que el vocablo ignora a Moravia y Silesia.
«¿Czechomoravia?»
Ondrej Hysek, presidente del pequeño partido «Los Moravos», aboga por la apelación en inglés «Czechlands» o por «Czechomoravia».
Para esta formación no parlamentaria «Chequia» y sus equivalentes constituyen «un ataque anticonstitucional contra la identidad de los moravos».
De todos modos un cambio precisa el visto bueno del gobierno, que se pronunciará en mayo, antes de ser enviado a la ONU.
Según Kristina Larischova, una diplomática a cargo del dossier, la República Checa sigue siendo «una excepción, o anomalía entre los Estados democráticos desarrollados» por carecer de una abreviación para las conversaciones informales.
«Es difícil tomar una decisión en nuestra propia lengua y todavía más en las extranjeras», afirma Karel Oliva, director del Instituto de la Lengua checa de la Academia de las Ciencias. «En resumidas cuentas lo decidirá el uso», zanja.