Tigres se puso a ley de uno en la final de la LVBP
Tras trabajar día y noche en su plan para cobrar venganza contra los Navegantes del Magallanes, el miércoles por la noche Austin Bibens-Dirkx no tuvo piedad sobre la lomita y lanzó seis sólidas entradas para guiar a los Tigres de Aragua a un importante triunfo, 6-1. Lauro que los dejó a tiro de conseguir el campeonato, al tomar ventaja de 3-2 en la Serie Final.
En los días previos al quinto juego de la serie, Bibens-Dirkx no tenía otra cosa en mente que borrar de la memoria de los aficionados aragüeños su primera apertura, en la que fue bateado con contundencia por la ofensiva de la nave.
Sin embargo, en esta ocasión una carrera en el segundo episodio sería el único daño que los filibusteros le infringirían al derecho, que solo permitió seis hits, propinó dos ponches y, lo más importante, no concedió boleto.
“Cometí un par de errores, pero por fortuna, pude hacer pitcheos de calidad después de cada uno de ellos. El único envío que dejé en el medio, me lo batearon por el medio. Es una de las cosas que sabía que podían pasar y que debía minimizar. Este es un gran equipo con grandes bateadores, pero sabía que todo iba a salir bien siempre y cuando mantuviera baja la pelota”, sentenció el estadounidense, tras conseguir su primer lauro en finales. “Es grandioso (tomar revancha). Se lo dije a Eduardo (Pérez) después del quinto inning, estoy listo para seguir. Todos mis pitcheos estaban bajitos, quería hacerlo bien. Cometí errores en mi anterior salida contra ellos y quería esa revancha. Además, el bullpen había tirado muchas pelotas, así que es bueno haberles dado un inning más”.
“Le dije a Bibens que tenía que pitchar mejor que la última vez y lanzó seis buenos innings. Con las carreras que anotamos mejoraron las cosas, porque Bibens tomó más confianza y nos hizo el trabajo que queríamos”, destacó el manager Pérez, tras concluir el desafío en el Estadio José Pérez Colmenares.
Debilitados por la pérdida de Luis Rodríguez y Ronny Cedeño, ambos por lesiones, los Navegantes trataron de tomar impulso temprano en el choque atacando a Bibens en el segundo inning. Doble de Félix Pérez y sencillo impulsor de Juan Apodaca, fueron suficiente para abrir la pizarra.
Para mantener la ventaja, el estratega Carlos García confiaba en Joely Rodríguez, uno de sus mejores brazos en la postemporada. Pero el dominicano no pudo imitar la gran labor de su antagonista en el montículo, siendo atacado también desde temprano por los bates locales sin encontrar respuesta a sus problemas.
