Emprender: una actitud positiva ante la vida
A la hora de emprender, hay que romper esquemas mentales y retar lo que en tu mente parezca imposible. Esto no significa que dejes de ser una persona realista, sino que generes sintonía con actitudes positivas y creativas las cuales te ayudarán a lograr cosas únicas que nunca pensaste que podrías lograr.
Es elemental tener la sabiduría para rodearse de personas agradables y positivas que vibren en la misma energía y deseos de superación que tú. Este tipo de personas son aquellas que les brillan los ojos, tienen sueños, ilusión, pasión y deseos de alcanzar grandes cosas. Generalmente, en el trabajo en equipo de este tipo de personas se conjugan pensamientos del mismo nivel vibratorio y con seguridad se podrán construir excelentes realidades.
La actitud positiva define a la persona emprendedora. El emprendedor adopta una manera de vivir única, que hace a la persona atrevida, creativa, apasionada, viendo oportunidades en donde otros nunca las verían y con una energía indescriptible que termina contagiando a su entorno. Para lograr esto hay que romper con la comodidad, negatividad, miedo y patrones de rigidez mental que normalmente introducen a las personas en una cotidianidad abrumadora.
Los emprendedores deben desarrollar la generosidad mental y compartir de manera muy creativa con una actitud positiva sus ideas y saber sacar lo mejor de su entorno para complementarse, consolidando ideas innovadoras que luego se transformen en emprendimientos exitosos.
Por: María Angélica Dao