«Gobierno financia presupuesto con el bolsillo venezolano»
“El gobierno nos ha presentado un presupuesto que se va a financiar con el bolsillo del venezolano. Casi 60% de los ingresos ordinarios, que no vienen del petróleo, se van a resolver con los 12 bolívares de cada 100 que el gobierno nos quita por concepto del Impuesto al Valor Agregado (IVA). Quiere decir que esos aumentos salariales que se han venido produciendo realmente no tienen efecto, porque cada vez nosotros recibimos más dinero pero compramos menos”.
De esta manera la diputada a la Asamblea Nacional, Vestalia Sampedro, miembro de la comisión de Finanzas del parlamento, evaluó el proyecto Ley de Presupuesto para el ejercicio económico 2016, presentado el pasado 20 de octubre por el ministro de Economía, Finanzas y Banca Pública, Rodolfo Marco Torres, y aprobado el 27 en primera discusión por la bancada oficialista de la AN. “El instrumento presupuestario que trajo a la AN, no recoge en ninguna de sus partes una solución a la crisis aguda que vive toda la población venezolana. Por eso nosotros hemos negado su aprobación”.
La especialista en el área de planificación y presupuesto criticó la manera como ha procedido el gobierno al impedir que el Parlamento aporte sus recomendaciones para la estructuración y desarrollo de este documento. “Elementos tan importantes como saber la verdadera tasa de inflación que pueda manejarse en el país, como cuál va a ser la tasa de crecimiento sobre la cual nos vamos a mover, o como va a ser el precio del valor de la moneda con respecto al dólar, son indicadores que desconocemos. Eso debería ser evidente y debería ser verdadero”.
Dólar a 6,30
“El gobierno ha mentido en lo que ha traído como presupuesto a la nación, puesto que nos dice que el precio del valor de nuestra moneda va a ser 6,30 -igual que este año- y realmente todos los venezolanos sabemos que eso no es asi. Una pequeña cantidad de dinero se coloca con ese valor de las divisas y las demás se cotizan con el paralelo e influyen en los precios y nosotros lo sufrimos con la inflación”.
Para la economista, aun cuando el gobierno no devalúa la moneda al mantener el tipo de cambio, el impacto de la medida es perjudicial al no contribuir con la disminución de la inflación, ya que nominalmente pareciera no tener ningún impacto pero implícitamente impacta el poder adquisitivo. “Cuando nos aumenta el salario, la inflación sube. Eso nos afecta a todos los venezolanos y con esos aumentos el gobierno vuelve a recoger el dinero a través del IVA, ese recurso que dispone nuevamente para continuar incrementando el gasto, lo que también se vuelve a revertir como inflación”.“Con este presupuesto se hace evidente que cada día nosotros vamos recibir más, pero vamos a comprar menos. Y como nosotros estamos aquí para defender al pueblo, es nuestra definitiva posición negar que el gobierno siga jugando con el venezolano y no tome las medidas necesarias para que el edificio pueda construirse sobre las variables macroeconómicas como lo son el precio del dólar, saber realmente cuál es la inflación, conocer cuál es la tasa de crecimiento y cuáles son las medidas que van a permitir que cambie la situación que estamos viviendo en este momento”.
La deuda social
Tanto el destino de los recursos asignados, como el origen de los fondos para satisfacer las necesidades presupuestarias, dejan de lado el interés primordial que debe privar en la composición de este proyecto: garantizar la estabilidad y desarrollo del Estado y suministrar los recursos necesarios para mejorar la calidad de vida de una manera sustentable y solidaria con los más necesitados.
“Allí hay una mentira también muy grande. El gobierno lo que ha privilegiado es el pago del endeudamiento. Tiene 400 mil millones de bolívares para pagar la deuda pública. Lo que dobla el gasto social o la inversión social como ellos lo llaman, que es lo que está destinado para las misiones, pago de pensiones, etc. Quiere decir que estos 400 mil millones de endeudamiento que contrajo el país cuando tenía la mayor bonanza, en donde ha debido haber un ahorro, como lo decía la gobernación del fondo de estabilización macroeconómica, ahorita nos hubiesen servido para tener una mejor ejecución hacia lo que el país está necesitando”, destacó.
“Si esos 400 mil millones de bolívares que están contemplados -que tienen el 25% del presupuesto, mientras los programas sociales tan solo tienen un 15 % – se unieran a esto, eso querría decir que más de 600 mil millones fueran a la atención de la vivienda, de la salud, de la educación, a la construcción, a la vialidad, a mejorar verdaderamente nuestras condiciones y con el empleo que se generaría a través de todas esas obras, nosotros tendríamos bienestar en la prestación del servicio y en la capacidad de emplearlo”, subrayó Sampedro.
“Entonces, el gobierno no tomó las medidas necesarias que son las bases para que el presupuesto pudiese servir como un instrumento positivo para lograr vencer todas las vicisitudes y calamidades que estamos viviendo todos los venezolanos. Por eso aunque tengamos cada día más dinero, compramos menos”.
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