¿Servirá para algo el 6D?
Venezuela afronta su peor situación histórica, paradójicamente, luego de haber sido beneficiada por un multimillonario boom petrolero sin precedente en precio y longevidad, aparte de las inconmensurables riquezas y bellezas naturales que brotan por todo el territorio nacional, penosa situación que ocurre y seguirá ocurriendo por dos principales detonantes; los gobernantes no cumplen con sus funciones, tampoco los electores.
Se aproxima el 6D, elección vital, la Asamblea Nacional no solo es la encargada de realizar leyes, es quien debe realizar acciones de seguimiento y control sobre la administración pública, es decir, todo lo que depende del presidente de la república; ministerios y sus dependencias, acuerdos internacionales, nombramientos, Leyes Habilitantes, entre otros, en un país extremadamente presidencialista como el nuestro esta actividad parlamentaria de control se hace vital. Sí observamos las naciones que hoy ostentan las mejores calidades de vida en el planeta apreciamos que tienen como elemento característico son naciones pobres, en el sentido que no poseen riquezas naturales, se basan en la mayor transparencia posible de la administración pública (control), en la elección más acertada posible de los gobernantes, en una ciudadanía cónsona con sus deberes/derechos, estos factores los han llevado a tener condiciones de vida que en Venezuela parecen un sueño, cuentos de hadas.
Venezuela espera solo por una sola acción ¡Una! que es tan importante cómo sencilla, no requiere milagros, ni intervenciones de otras naciones, organismos internacionales, ni siquiera de origen divino como muchos alegarían, Venezuela solo espera a que sus habitantes asuman su ciudadanía. Sí bien es cierto, los gobernantes son responsables directos de sus gestiones también son responsabilidad de quienes los eligen, aceptar gestiones públicas precarias genera nivel de vida precario, por el contrario la exigencia del pueblo conlleva a gestiones probas, eficientes, con resultados palpables. En Venezuela el exagerado presidencialismo plasmado en la constitución hace que la actividad del control sobre el ejecutivo nacional sea determinante, para ello el parlamento nacional debe ser inquisidor, infatigable, inexcusable a la hora de investigar y evaluar el ejercicio de las funciones presidenciales, es por ello que los venezolanos debemos tomar en serio las próximas elecciones.
Nuestra nación afronta la peor situación de su historia, así se palpa en la calle más allá de cualquier discurso. La elección de los próximos parlamentarios cobra una relevancia histórica incomparable, se requieren hombres y mujeres casados con la constitución ¡La escrita no la interpretada! conscientes de las problemáticas reales, que direccionen en rumbo correcto las innumerables atribuciones presidenciales ¡Solo así el 6D será útil!
La elección de parlamentarios fieles solo a directrices presidenciales, legados partidistas, depararía un trágico empeoramiento de lo que hoy ya estamos padeciendo.
@leandrotango