¿Consumir grasas es bueno o malo?
Existe una divergencia entre expertos en cuanto al consumo de grasas. Algunos afirman que ingerirlas es perjudicial para la salud, mientras que otros arguyen lo contrario. Para la población finlandesa la razón la tienen los últimos. En Finlandia optan por alimentos ricos en calorías.
En consecuencia, el consumo de mantequilla y quesos ha aumentado considerablemente en los últimos años en ese país, para desesperación de los médicos.
Los finlandeses consumieron una media per cápita de 17,5 kg de queso y 2,5 kg de mantequilla en 2007, contra 26 kg de queso y 4 kg de mantequilla en 2014, según estadísticas del Instituto de Recursos Naturales finlandés.
Las autoridades se preocupan por esta tendencia, que consideran perjudicial para la salud.
«Hasta 2007, los niveles de colesterol de la población bajaban. En 2012, la situación empeoró nuevamente, lo que coincide con el aumento del consumo de grasas saturadas», se lamentó ante la AFP la responsable de la Federación Finlandesa de Cardiología, Marjaana Lahti-Koski, también miembro del Consejo Nacional de Nutrición.
Este último recomienda el consumo de productos lácteos con bajo contenido en materias grasas o sin estas, y de productos ricos en grasas no saturadas como los aceites, la margarina y las nueces.
Pero, entre los expertos, existe una minoría rebelde que sostiene que hay que rehabilitar la grasa animal. Kari Salminen, profesor de Ciencias de la Alimentación, y exdirector de investigación del mayor productor lácteo de Finlandia, es uno de ellos.
«Estuve muy implicado en el desarrollo de productos con bajo contenido en grasas cuando había una gran demanda. Pero no veo en qué ayudan a mejorar la salud. Yo mismo no consumo productos bajos en materias grasas», explicó a la AFP.
Salminen cita varios estudios que afirman que la relación entre las grasas saturadas y las enfermedades cardiovasculares no puede probarse científicamente.